Hassán Pérez Casabona
Los seres humanos solemos establecer relaciones especiales con las profesiones que escogemos. Se trata, buena parte de las veces, de amores a toda prueba capaces de desafiar con éxito cualquier escollo. Ese es el carácter de los nexos entre Leinier Domínguez y el ajedrez.
Es por tal razón que la noticia corrió como pólvora: el Ídolo de Güines aceptó, tras más de 10 meses alejado de las 64 casillas, la invitación de los organizadores para intervenir en la modalidad de partidas Blitz, en el IV Circuito Grand Chess Tour, que acogerá la ciudad estadounidense de Saint Louis, del 13 al 19 de agosto.
La reaparición del antillano será al más alto nivel, pues tendrá como oponentes a varias de las luminarias cimeras del firmamento ajedrecístico universal. La lid cuenta como aliciente con el retorno de Garry Kasparov, alejado de los escenarios competitivos desde el 2005. El llamado Ogro de Bakú es considerado como el exponente más encumbrado de cualquier época dentro del juego ciencia.
Junto al mayabequense (2796 puntos Elo en el acápite Blitz) verán acción el ruso Ian Neponniatchi (2819); el armenio Levon Aronian (2797); el estadounidense Hikaru Nakamura (2796); el indio Viswanathan Anand (2789); el ruso Serguey Karjakin (2773); el italiano Fabiano Caruana, quien representa a EE.UU. (2752); el vietnamita Le Quang Lien (2747) y el checo David Navara (2737). Entre el 1y el 12 de agosto se celebrará en la propia urbe del estado de Missouri la Copa Sinquefield de partidas clásicas. El certamen “galáctico” lo encabeza el noruego Magnus Carlsen, catalogado con justicia el Mozart de los trebejos, y en el igualmente contendrán Neponniatchi, Aronian, Nakamura, Anand, Karjakin y Caruana. A ellos se sumarán los también extraclases Maxime Vachier-Lagrave (Francia), el filipino nacionalizado estadounidense Wesley So, y el ruso Peter Svidler