El plan de acción de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) para dar respuesta a la prevención y enfrentamiento a la trata de personas y la protección a las víctimas, durante el período 2017 al 2020, fue presentado hoy en la sede de la editorial de la Mujer, con la asistencia de Teresa Amarelle Boué, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y secretaria general de la organización femenina.
La concepción de la FMC acerca del enfrentamiento a la trata de personas coincide con la Resolución 69/149 de la Asamblea General de Naciones Unidas de diciembre de 2014, en la cual se expresa “que las medidas encaminadas a promover la igualdad entre los géneros y a empoderar a las mujeres y las niñas reducen la vulnerabilidad ante la trata”.
Durante el intercambio con representantes de varios organismos e instituciones, Amarelle subrayó que el plan de la organización está fundamentado en los principios del Plan de Acción Nacional para la prevención y enfrentamiento a la trata de personas y la protección a las víctimas. Añadió que las acciones se articulan con las otras organizaciones de la sociedad civil y organismos del estado enfocados en el enfrentamiento a este fenómeno.
La política de tolerancia cero del gobierno cubano es una garantía para desarrollar toda la labor de la FMC a nivel comunitario y también en la relación con los organismos y organizaciones del estado y la sociedad civil, significó.
La dirigente femenina aseveró que parten del principio de que “la trata de personas es una expresión de la violencia de género, y por ello se debe dar respuesta a esa problemática no solo con medidas específicas, sino enfrentando las causas profundas que generan la desigualdad”
Es por ello, alegó, “que la prevención es el pilar de nuestra labor haciendo hincapié en los factores de vulnerabilidad de mujeres, niñas y niños que sean detectados en la comunidad”.
Si bien la realidad de la mujer cubana no es favorable para que se produzcan estos fenómenos, si se dan algunos rasgos de esta conducta en la sociedad, relacionados con la explotación sexual y el proxenetismo. “Todo lo que se pueda hacer para sensibilizar e informar tenemos que hacerlo”, aseveró.
Isabel Moya, directora de la Editorial de la Mujer, hablo sobre el trabajo que ha desarrollado la FMC, de conjunto con la Policía Nacional Revolucionaria, en los diferentes polos turísticos, así como con centros nocturnos, a fin de esclarecer y dar información sobre cuáles puede constituir fenómenos de este tipo.
Un papel esencial en el trabajo de la organización femenina lo desempeñan los especialistas en prevención social, los equipos multidisciplinarios de Procedimiento Familiar, con cobertura en todos los municipios, así como las 50 mil trabajadoras sociales voluntarias y las 173 Casas de Orientación a la Mujer y la Familia.
Al intervenir, Yamila González, vicepresidenta de la Unión de Juristas, ponderó el plan elaborado por la FMC y subrayó la importancia de la integración de todos en el camino de atención a las víctimas de la trata y otras formas de violencia.
Insistió en la necesidad de continuar elevando la cultura jurídica de la población, así como la capacitación de los especialistas, abogados, jueces, fiscales e instructores en estos asuntos para actuar de forma cohesionada.
El Doctor Julio César González Pagés, estudioso de las materias de género en Cuba, reconoció el papel que la FMC ha desempeñado desde 1960 en el acompañamiento al estado cubano en el desarrollo de sus políticas públicas, en especial la igualdad de género.
