Los crecimientos que Cuba ha logrado en la producción azucarera de los últimos tres años demuestran que la curva ascendente es sostenible y que puede construir las bases para llegar a los cuatro millones de toneladas del grano.
Así lo consideró, en declaraciones exclusivas para Trabajadores, José Oribe Vides, director ejecutivo de la Organización Internacional del Azúcar, quien asiste al XIV Congreso Internacional sobre Azúcar y Derivados, que concluye esta tarde en los salones de Pabexpo, al oeste de La Habana.
Significó que la producción azucarera lleva tres años consecutivos creciendo; es evidente que lo que está sembrando se está cosechando.
No obstante, consideró que Cuba debe fomentar un crecimiento auténticamente participativo con el concepto de que el trabajador es la raíz de la pirámide de competitividad; en la medida que se empodere al recurso humano, se le capacite y se le tecnifique, el andamiaje para elevar su producción y la eficiencia va a ser mayor.
Y AzCuba está tomando direcciones acertadas, esencialmente por priorizar la bioenergía como la primera área donde se está dando participación a la inversión extranjera, lo cual puede revertirse luego en la producción de caña y por consiguiente de azúcar, dijo.
El directivo de la OIA valora las perspectivas de la producción de alcohol, ya que también se están incluyendo en la cartera de oportunidades la modernización de destilerías, que pueden producir hasta 200 mil litros anuales. Y citó la experiencia de su país, Guatemala, que desde hace 19 años produce un ron añejado llamado Zacapa que acaparó la atención hasta en los países europeos, agregando altas sumas de dinero a la arcas de la nación.
En instituciones de AzCuba se produce el ron añejado Vigía, de altísima calidad, que puede inundar los mercados nacionales y extranjeros, ya que Cuba tiene na gran tradición en el comercio de rones. Siento que el proyecto para potencializar la calidad de las mieles cubanas y producir rones finos es algo que vale la pena, y que le va a reportar un rédito significativo a Cuba.
José Oribe también exaltó la calidad de los alcoholes que fabrica Cuba y se destinan además, a las producciones farmacéuticas, industriales y alimentarias.
Nosotros estamos muy satisfechos porque en la OIA no pasa una semana sin que recibamos una consulta sobre Cuba. Dos preguntas son recurrentes: si va para arriba a producción y si es sostenible; lo cual positivamente.
Sobre la calidad de azúcar cubana, aseguró que es buena, pero tiene que mejorar; ahora las grandes refinerías, que son los potenciales consumidores de este crudo, están demandando estándares muy superiores: tienen que centrarse en reducir dextrana y contenido de almidón, esas son las prioridades para elevar la calidad.
El XIV Congreso Internacional sobre Azúcar y Derivados concluye en la tarde de este viernes, y con él cierran el foro de negocios y la feria comercial, dos de las iniciativas que dieron lucidez al evento y atrajeron a más de 300 especialistas y hombres de negocios de 35 países.