Desde la provincia de Granma escribe alarmado Jorge Luis Sánchez Gallardo por las irregularidades que detectó en el Registro de salarios y tiempo de servicios conocido como tarjeta SNC-2-25, de su centro, la Oficina de Monumentos y Centro Histórico de Manzanillo.
Según relata en su carta lleva dos años negándose a firmar dicho documento por los graves errores que contiene. Por citar dos ejemplos menciona que en el 2015 solamente tiene apuntado el salario de cinco meses y en el 2016 el de uno.
“Cada vez que acudo al departamento de Contabilidad hay una persona distinta en esta actividad, que promete enmendar la tarjeta”, explica Jorge Luis. La última ocasión fue en febrero de este año, y el compañero de turno le aseguró solucionar todo antes de que concluyera marzo, pero pidió la baja.
“Sigue pasando el tiempo y me preocupa que eliminen las nóminas de los salarios —sin incluir los datos faltantes en la tarjeta— pues dicen que solo se guardan durante cinco años; además no soy el único con esta situación”, refiere. Jorge Luis concluye solicitando orientación, ya que desconoce a dónde debe dirigirse y quién finalmente asumirá la responsabilidad de estos errores, que parecen ser problema de otro y no del departamento de Contabilidad de su institución.
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