El Ejercicio Popular para enfrentar situaciones de desastres, conocido por Meteoro 2017, tendrá este sábado su primer día de actividades en toda Cuba, donde desde hace 31 años la Defensa Civil centra las acciones en la prevención.
Su objetivo es la protección de la población y la preservación de la economía de los daños ocasionados por los eventos de desastres y los efectos del cambio climático.
Este sábado, los órganos de dirección y de mando en todos los niveles de dirección, entre otras tareas evaluarán los peligros apreciados y los resultados del intercambio de información con las instituciones de vigilancia y monitoreo, de acuerdo con especialistas del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil.
Además, puntualizarán el funcionamiento de los sistemas de alerta temprana, la valoración de los daños y necesidades, así como las acciones de la etapa de recuperación (rehabilitación y reconstrucción) en caso de presuntas contingencias de calamidades.
Tendrán en cuenta también las experiencias en ese sentido del año pasado, sobre todo las del huracán Matthew, que en la noche del martes cuatro de octubre arrasó el oriente cubano, con una fuerza de categoría cuatro, lo cual provocó enormes destrozos, pero ningún fallecido.
El domingo, en su segundo y último día, Meteoro 2017 se centrará en acciones prácticas encaminadas a la disminución de vulnerabilidades que involucren a entidades y comunidades, principalmente enclavadas en zonas de mayor riesgo.
La jornada contempla, asimismo, la preparación de las formaciones especiales ingenieras de forestales y servicios comunales, para su entrada en el escenario de los hechos en caso necesario.
Este es el principal ejercicio que desde 1986 realiza el Sistema de Defensa Civil Cubano, con el fin de elevar la preparación de los órganos de dirección y la población ante ciclones tropicales y otros peligros de desastres, fenómenos de origen natural, tecnológico y sanitario.
La temporada ciclónica en la cuenca atlántica, que incluye el golfo de México y el Caribe, empieza el primero de junio y termina el 30 de noviembre, y la de 2016 se caracterizó por ser de normal a activa, aunque Cuba debe permanecer preparada ante cualquier cataclismo
Tomado de ACN
