La II edición del Encuentro Internacional Danzonero Miguel Failde in Memoriam, que comenzó este 30 de marzo y se extenderá hasta el 2 de abril en la occidental provincia de Matanzas, inició su segunda jornada con presentaciones de musicales y audiovisuales sobre este emblemático género musical, sesiones que tuvieron lugar en la sede del teatro Mirón Cubano.
Con mucho entusiasmo se espera la presentación del libro ¡Mambo qué rico e´e´e´!, de Ediciones Matanzas, acontecimiento anunciado para realizarse en la sala de conciertos José White. El texto, de la autoría de Yanira Marimón y Ulises Rodríguez Febles recrea la vida y la obra de Dámaso Pérez Prado, creador de esta sonoridad.
La terraza del restaurante Bahía, en la ciudad matancera, prestará su salón para que grupos bailables procedentes de México realicen sus ejecuciones, lo mismo que un poco más tarde harán parejas cubanas.
En la noche de ayer tuvo lugar la apertura oficial del importante certamen en el céntrico Parque de la Libertad. Momentos antes, durante la conferencia de prensa, se escucharon fragmentos de la grabación del poema Me desordeno, amor, me desordeno, de la poetisa Carilda Oliver, esta vez en tiempo de danzón, tocado por la Orquesta Miguel Failde.
En su tierra matancera, donde en enero de 1879 Failde estrenara de su autoría Las alturas de Simpson, la primera pieza de este ritmo, se reúnen compositores, musicólogos, investigadores, intérpretes y bailadores, en pertinente homenaje al autor de un género declarado en el año 2013 Patrimonio Inmaterial de la Nación Cubana.
Ethiel Fernández Failde, tataranieto de Miguel Failde, aseguró que esta versión del Encuentro Internacional Danzonero, así como también su predecesora, pretenden recontextualizar el género, para que mantenga sus esencias y no perezca.
Según el comité organizador, el evento está dedicado a los natalicios de Miguel Failde (165 años), Aniceto Pérez (130) y de Dámaso Pérez Prado (100), y al quinto aniversario de la creación de la Orquesta Miguel Failde.
Además de los concursos de baile y de composición, el programa incluye bailables en varias plazas citadinas, momento este último que suma a personas de todas las edades.
No ha habido música más cubana que nuestro danzón. Nuestro danzón en su estructura clásica, exuda los campos de Cuba, el azul de nuestro cielo, nuestras palmas. Todo esto lo dicen el cinquillo armónico que constituye su fortaleza melódica, instrumental y armónica. Desde Miguel de Faílde, pasando por el mago de las teclas, Antonio María Romeu, que escribió más de mil danzones, todos obras maestras de su género y todos los otros grandes maestros de nuestro baile nacional : Rubalcával, Tata Alfonso, Rodrigo Prats, José Urfé, Miguel Valdés y tantos, tantos otros. Mi omisión de alguno de ellos se debe a un lapsus mentis y no a un menoscabo de sus talentos. Una observación, en México las claves acompañan al movimiento lento del danzón que lo hace rítmica y melódicamente embrujador Y TAN TíPICO DE NUESTROS RITMOS TAN CUBANOS ORIGINáNDOSE EN LAS DANZAS Y CONTRADANZAS. ¿ Por qué se omite en nuestra Cuba, su cuna ?