Nivia Sánchez López es una de esas mujeres que escogió la profesión que más le gustaba. Y bien lo demuestran los cerca de 29 años que lleva atendiendo animales y pegada a la tierra.
Allá en medio del monte, en los campos entre Camagüey y Florida, es feliz: trabaja y sabe que como técnica veterinaria ayuda a la UEB La Luz, de la Empresa Ganadera de Camagüey, a ser eficiente. “Para mí es un orgullo grande poder contribuir con la comida de la gente, así se ve lo que uno hace”, asegura con alegría.
Gracias a Nivia las 570 gallinas de segunda categoría que contrataron con el Combinado Avícola Nacional logran más de un 70% de puesta; en otras palabras, siete de cada diez se mantienen produciendo, una media que supera ampliamente la conseguida en otros lugares. “Y a ‘mis’ carneros nunca se les enferman las pezuñas, porque siempre estoy pendiente de que sean sacados a pastar después de las 10 de la mañana para que no les afecte el rocío”, agrega.
Su constancia le ha dado alegrías. Entre todas, ninguna se compara con la de su familia, afincada –como ella– en la tierra, y la condición de Vanguardia Nacional, conquistada por siete años consecutivos.
“Pero eso no es na’ si a mi me gusta el trabajo, esta es como mi casa, por eso lo hago con calma y mucha paciencia, aún cuando todavía crean muchos que la mujer es pa’ la casa, yo digo que es damos mucho más”.