Era un informe con muchos números y pocas valoraciones. Intentaba evaluar el cumplimiento de la política sobre los salarios, sistemas de pago y estimulación en pesos convertibles en un sector de servicio público al cierre del tercer trimestre del 2016. La discusión tuvo lugar en el secretariado nacional de uno de los sindicatos que atiendo como periodista.
Fue útil el debate, porque puso en evidencia cómo los guarismos y los términos a veces pueden camuflar deficiencias que necesitan un ojo conocedor y entrenamiento del dirigente sindical para que no le pasen gato por liebre.
A simple vista, la situación parecía muy favorable en relación con el pago por resultados a partir de la influencia positiva de la aplicación desde el pasado año de la Resolución 6 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
En un organismo los sistemas de pago por rendimiento beneficiaban ya a casi el 95 % de los trabajadores; otras organizaciones superiores de dirección empresarial reportaban sobrecumplimientos significativos en las ventas y las utilidades, así como salarios medio superiores a los planificados.
Pero entre tanta cifra optimista, por ejemplo, aparecían dos sistemas empresariales que blasonaban de que su gasto de salario por peso de valor agregado bruto fue de 0,18 y 0,13 centavos, inferiores en ambos casos al 0,22 y el 0,17 previstos en el plan.
Fue una compañera del Secretariado Nacional de la CTC quien le apuntó al Sindicato la incongruencia. Al quedar por debajo del nivel que planificaban, en realidad esas entidades dejaron de pagar a sus trabajadores un salario que podían distribuir. Esos 0,04 centavos menos de gasto de salario por cada peso de valor agregado bruto que produjeron aquellos colectivos, significaban miles de pesos que no recibieron como ingreso los afiliados de aquel sindicato. Y eso debía conllevar un análisis con tales administraciones, pues ese es un indicador para cumplir, no para ahorrar.
Había otras señales de problemas en aquel informe bajo el camuflaje de datos y frases edulcoradas provenientes de un enfoque administrativo, y no sindical. Mencionaba, por ejemplo, “deducciones” hasta el salario escala para un número importante de trabajadores en determinado grupo empresarial, cuando en realidad debía decir que el Estado les garantizaba así una protección salarial, ante la mala gestión administrativa previa que implicó errores en la aplicación de la Resolución 6, por la distribución de ingresos por encima del plan y sin correspondencia con los resultados productivos reales.
Otra pelea, en fin, para el sindicato, que no puede aceptar distorsiones en la política salarial que repercutirán negativamente en la economía del país y, a la larga o a la corta, también perjudicarán al colectivo laboral cuando los organismos de control externo las detecten.
La alerta, entonces, es que no basta con que las direcciones administrativas le presenten al movimiento sindical, desde la sección de base hasta un sindicato nacional, una retahíla de números en apariencias muy positivos, que incluye crecimientos en el salario medio y el pago por resultados. Hay que profundizar en el análisis de esa información económica, sobre la base del conocimiento y el cuidado de los intereses de los trabajadores y de toda la nación.
ya traté de expresarme hace unos instantes,pero no resultó.el compañero presidente general como lo llama el historiador de la ciudad,nos ha llamado a ser valientes y a denunciar lo mal hecho,pero a veces o casi siempre hay que enfrentar no pocas tempestades cuando decimos algo que molesta aún y cuando pueda ser verdad.gracias por atenderme.
todo está muy bien,pero para que el cubano medio pueda vivir sin preocupaciones debe ganar no menos de 2500.00 pesos o acaben de tener la valentía de topar los precios en los mercados agropecuarios,cosa que está legislada y no se aplica,y tambien de estabilizarlos precios y subir a llos jubilados los salarios a devengar después de estarse sacrifuicando tantos años por hacer a vanzar al país y puedan tener una vejez feliz.acabar con los teques y avanzar paraque el país progrese de verdad.bolivia era el país más pobre de américa despues de haití,vamos a tener que aprender muchas cosas de los bolivianos,porque no estoy poniendo ejemplos de paises ricos ni como venezuela que tienen grandes reservas de petróleo.
Este artículo es una denuncia política, moral, revolucionaria porque detrás de estas equivocaciones pueden existir «N» razones: justificativas, injustficadas o mal intencionadas, hasta falsos conceptos de ahorro para poteger al Estado,o deliberadas acciones para que esta Resolución 6 aparezca como otra mas que no esta a tono con los intereses de los trabajadores y la Revolución cuando no puede haber divorcio entre dos aspectos definitivamente esenciales de la tarea principal de todos los cubanos dignos:la Revolución.La Resolución 7 cumplió la misión de demostrarnos que ese instrumento era errático y la Res 6 abrió un camino amplio y seguro y mañana podrá haber otra Res, si las circunstancias lo permiten.Felicidades periodista, Felicidades a Trabajadores.
El gasto de salario por peso de valor agregado bruto es un indicador limite maximo, es el tope hasta donde puede llegar la masa de salario que se forma pero eso no quiere decir que se pague todo El Resuelvo septimo de la Resolucion 6 establece que el salario a formar y distribuir responde al nivel de cumplimiento de los indicadores directivos y limites planificados por lo que el salario a pagar tiene que ser proporcinal al cumplimiento del plan de ventas netas. El gasto de salario/VAB es un resultado y no un formador del salario. Se equivoca la dirigente sindical en su apreciacion. El analisis es mas profundo.