Sara canta que a los héroes se les recuerda sin llanto, pero Matanzas no la escucha. Una embarazada pasa delante de la foto de Fidel, y el llanto le moja el rostro, le inunda los ojos. Se lleva una mano a la barriga y dice bajito. “Te llamarás como él”.
Le sigue un hombre, un hombre que lo mira, lo mira unos segundos y voltea el rostro, aprieta los ojos, y en suspiro profundo, en suspiro hondo, busca consuelo.
Dos ancianas llegan, dos que gimen como lo hace una madre por la muerte de un hijo. Una mira el lente de la cámara y dice, “se nos fue, se nos fue Fidel”, y la hija la sostiene firme. La otra coloca una flor, un gladiolo. Lo ha besado antes.
Sigue llegando pueblo a la sede de la Asamblea Provincial del Popular. El 25 de noviembre, Raúl, la noticia, Fidel ha muerto…aún duele. Dolerá siempre. No importa si a los héroes se les recuerda sin llanto. No importa que lo cante Sara. Matanzas llora.