Junto al Apóstol, Céspedes, Mariana, Frank, sus hermanos de la generación del centenario… en el cementerio de Santa Ifigenia, en el Santiago de Cuba que tanto quiso, se hará eternamente savia de la patria y luz de futuro el Comandante Fidel.
Para acogerlo en su regazo y honrarlo en su infinita dimensión se ultiman detalles, los cuales comentó a la prensa el compañero Lázaro Fernando Expósito Canto, primer secretario del Partido en la provincia, quien significó que “tener al líder de la Revolución custodiado en esta tierra, con su mirada siempre sobre nosotros, es algo extraordinario, implica honor y compromiso”.
El también Héroe del Trabajo de la República de Cuba dijo que habrá varios momentos de homenaje popular, los cuales inician este lunes y hasta el día 29, “en ocho municipios se abren las puertas de una institución estatal y en el la localidad cabecera serán dos — la Plaza de la Revolución Antonio Maceo y la sede de la Asamblea Municipal del Poder Popular— para que todo el que desee pase junto a su imagen, si lo estima coloque flores, todo en gesto de infinito respeto y cariño”.
En mil 703 colegios electorales existirá también la posibilidad de rendirle homenaje y a su vez firmar el solemne juramento de cumplir el concepto de Revolución.
El compañero Expósito destacó igualmente que si bien los santiagueros portarán un brazalete rojinegro el próximo 30 de Noviembre, en ocasión del alzamiento armado de la ciudad de Santiago de Cuba, todos están convocados para llevarlo el resto de los días hasta que concluya el duelo oficial.
De manera especial el recibimiento del cortejo fúnebre tendrá lugar el día 3 de diciembre e iniciará por el municipio de Contramaestre, limítrofe con la provincia de Granma, con la posibilidad de que el pueblo, situado a ambos lados de carreteras, avenidas y calles despida por siempre al querido Fidel.
A partir de las 2 de la tarde cortejo se desplazará por diferentes arterias de la ciudad, recorrido que también estará acompañado por los santiagueros y aquellos que provenientes de otras latitudes quieran sumarse a tan sentida ocasión.
A las 7 de la noche del domingo, en la plaza Antonio Maceo, se unirá al pueblo de la provincia una representación de guantanameros, granmenses, tuneros, holguineros y camagüeyanos para participar en el acto de masas anunciado por la Comisión Organizadora del Comité Central del Partido, el Estado y el Gobierno para las honras fúnebres del Comandante en Jefe.
El propio día 4, durante el traslado de las cenizas, desde la plaza hasta el cementerio de Santa Ifigenia, por la avenida Patria, igualmente el pueblo podrá darle un último adiós a su líder.
A partir de ese momento esta tierra arropará en el más cálido de sus recuerdos el palpitar del alma y los pasos de siete leguas de ese gigante de la nación y del mundo que aún cuando ha partido físicamente se queda impregnado en el espíritu del llano y la Sierra.
Santiago de Cuba y Fidel Castro Ruz se amalgamarán en un especial modo de rebeldía y heroicidad grabados por siempre en una frase que ahora se hace recíproca: ¡Gracias, Santiago! ¡Gracias, Fidel!
