Los 14 mil 930 hombres y mujeres agrupados en la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (Anir) en Santiago de Cuba sobresalen por un significativo aporte económico y social, el cual impacta favorablemente en la cotidianidad de buena parte de la población de este territorio.
Como ejemplo de lo anterior puede citarse el quehacer de los aniristas de la Empresa Laboratorio Farmacéutico Oriente, quienes con el liderazgo de Ismael Paz, diseñaron y construyeron una máquina para el llenado automático de los lotes de soluciones concentradas de hemodiálisis, producto que suministran a toda la zona oriental y que resulta imprescindible en el tratamiento de quienes dependen de ese proceder para sobrevivir.
La mencionada creación, distinguida en este 2016 con el premio al mayor impacto económico, ahorra al país más de medio millón de euros por concepto de compra de la maquinaria, además de elevar la calidad de la solución concentrada, incrementar la productividad y humanizar el trabajo.
Igualmente resaltan entre los aportes de los santiagueros las mejoras en la recepción de la señal de la televisión y de la telefonía móvil en localidades serranas como Ocujal, Uvero, Villa Turquino y Caletón Blanco, todas en el municipio de Guamá, y allí también, en particular en la carretera que enlaza a Santiago de Cuba con Granma, el diseño de la obra protectora contra las penetraciones del mar, este último ganador de uno de los siete premios a la innovación de mayor impacto en el país en el año 2015.
