Con solo recorrer algunas áreas y terrenos de esta emblemática fábrica se puede apreciar el estrago de la criminal política de bloqueo económico contra Cuba. Allí sobran razones para que sus trabajadores expresen —como hicieron el viernes último— un rechazo total a la criminal y envejecida política de Estados Unidos.
A solo unas horas del aniversario 90 del natalicio de Pedro Marrero, un obrero del sector cervecero que pasó a la historia cubana el 26 de julio de 1953, los trabajadores de la Guido Pérez, en el limítrofe municipio habanero del Cotorro, expresaron su indignación contra el cerco dañino, que no ha podido vencerlos.
Y se habló también de que para ayudar a sufragar los gastos del asalto al Moncada, Pedro Marrero vendió su refrigerador y el modesto juego de cuarto de su casa; y si no entregó más a su querida causa fue porque su jefe de entonces —y jefe hoy de todos los cubanos, Fidel Castro Ruz—
lo impidió.
A Marrero dedicaron los trabajadores de la cervecería Guido Pérez, antigua Hatuey, la jornada de este viernes, una perfecta ocasión para saludar también la celebración desde el próximo 28 la conferencia nacional de la organización sindical de quienes laboran en el sector de la industria alimentaria y la pesca en el país.
El acto, breve y lleno de patriotismo, estuvo encabezado por Milagro de la Caridad Pérez Caballero, integrante del Secretariado Nacional de la CTC y por Pedro Díaz Jover, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca.
