La Federación Internacional de Voleibol (FIVB) anunció esta semana la lista de países que animarán la Liga Mundial (M) y el Grand Prix (F) del 2017, entre los cuales no aparece Cuba por primera vez de debutasen en 1991 y 1993, respectivamente.
Según la entidad mundial, los clásicos anuales tendrán lugar en varias ciudades del planeta divididos en tres niveles cualitativos, con finales en cada uno de ellos para definir los líderes y formular la clasificación final del certamen.
En el nivel elite de la LMV aparecerán Brasil, Italia, Polonia, Irán, Serbia, Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Francia, Rusia, Bulgaria y Argentina.
En el segmento intermedio lidiarán Corea del Sur, República Checa, Eslovenia, Finlandia, Portugal, Japón, Australia, Eslovaquia, Holanda, Egipto, Turquía y China.
La franja baja de la lid será animada por Grecia, México, España, Catar, Taipei de China, Túnez, Montenegro, Estonia, Austria, Alemania, Kazajistán y Venezuela.
En cuanto al Grand Prix, el nivel principal contará con Brasil, Bélgica, Turquía, Serbia, Estados Unidos, Rusia, Italia, China, Holanda, República Dominicana, Japón y Tailandia.
En el segundo escalón jugarán Alemania, Bulgaria, Corea del Sur, Kazajistán, Polonia, Canadá, Argentina, Croacia, Puerto Rico, República Checa, Perú y Kenya.
En el tercer nivel estarán Australia, Trinidad y Tobago, México, Hungría, Colombia, Argelia, Camerún y Azerbaiyán.
El voleibol cubano será la más grande ausencia dentro de la cita varonil luego de que Holanda (monarca en 1996) dijera adiós por cinco temporadas a partir del 2004. Y aún más se extrañará en el sector femenino, pues las Morenas fueron el principal referente del evento en la década de los años 90 del pasado siglo.
Aunque las autoridades de la Federación Cubana de Voleibol (FCV) no han confirmado en las últimas horas las causas exactas de esas ausencias, este reportero conoce que la FIVB está exigiendo el pago por adelantado de las cuotas de inscripción en esas justas, algo que Cuba jamás había tenido que realizar con anterioridad.
En las actuales condiciones de nuestros equipos no resulta viable para la FCV, seguramente, desembolsar una suma considerable de dinero teniendo escasas posibilidades de recuperarlo obteniendo buenos dividendos en las lides.
Reitero que habrá que esperar por las valoraciones de la FCV, pero este asunto es de considerable peso, máxime tratándose la Liga Mundial y el Grand Prix de eventos de carácter marcadamente comercial.
También puede tratarse de una estrategia para reorganizar los planteles nacionales, y perfilar con otra intención su participación internacional en el ciclo olímpico que apenas comienza y cerrará en Tokio 2020.
Lo cierto es que faltar a esos conciertos mundiales es otro duro golpe para nuestro voleibol, que debe proponerse —entre tantas cosas— regresar a esas pasarelas con la fuerza suficiente para sostenerse por sí mismo y regalar alegrías a sus seguidores.