Decir Eusebio Leal es decir Cuba y sus símbolos, es decir pasado y presente de cara al futuro, es decir lealtad sin límites a la Patria, a sus líderes y a su pueblo, resaltó este martes Gustavo Cobreiro, rector de la Universidad de La Habana (UH), en el acto de entrega de la condición académica de Doctor Honoris Causa en Humanidades al Historiador de la Ciudad de La Habana.
Durante la solemne ceremonia que tuvo lugar en el Aula Magna de la UH —con la presencia de Homero Acosta, secretario del Consejo de Estado— Cobreiro leyó la resolución rectoral número 514 del presente año donde se reconoce, además, que Eusebio ha dedicado su vida al estudio, la preservación, el rescate y difusión de la historia de Cuba, inculcando los valores patrios y de identidad nacional a todo un pueblo.
Además, señala el texto, ha realizado una extraordinaria labor historiográfica, dándole continuidad al legado de su maestro y predecesor Emilio Roig, como Historiador de la Ciudad de La Habana.
Al pronunciar las palabras de elogio el Doctor Eduardo Torres Cuevas resaltó que en pocas ocasiones se ha sentido en una situación tan difícil y tan honrosa como la de hoy.
Honrosa —dijo— por el privilegio que se me confirió al hablar en este acto a nombre de nuestra Universidad, de su dirección y de su claustro de profesores.
Difícil —agregó— porque es tal la envergadura, variedad, riqueza, originalidad, osadía, rigor, de la obra de Eusebio Leal Spengler que no puedo menos que confesar que lo que hoy exprese aquí es, simplemente, una aproximación, quizás más bien, una incitación al necesario estudio de lo que ella significa en la captación y análisis inteligente y profundo de muy variados componentes de la nación, de las ciencias, de la cultura y del espíritu vivificador que lleva por nombre cubanidad.
“En pocas personas como en Eusebio Leal Spengler he hallado el modo armónico en que se articulan tan diversos componentes del conocer, sentir y pensar por Cuba”.
Torres Cuevas destacó la magnitud de su obra y señaló que ya con anterioridad ha recibido la investidura de Doctor Honoris Causa y Profesor de Mérito de 18 universidades nacionales y extranjeras y ha pronunciado conferencias magistrales y académicas en más de 70 universidades en no menos de 45 países.
Asimismo, resaltó que su dirección al frente de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (apenas en un período de diez años) recoge la restauración y terminación de 80 obras de patrimonio cultural, 14 hoteles, un centenar de instalaciones turísticas y 171 obras sociales, a lo que se añaden más de tres mil viviendas beneficiadas.
Emocionado por tan honroso reconocimiento, Eusebio agradeció a sus profesores que tuvieron la paciencia de modelar las intenciones y el deseo de todos aquellos conocimientos que son impensables a la vida.
Siguiendo la doctrina del eminente pedagogo cubano don José de la Luz y Caballero —aseveró— era menester aceptar que la escuela y la educación formaban al hombre, al individuo para la vida, y que debía ser según el concepto esperanzador de la palabra un evangelio vivo.
Con razón se ha dicho —continuó— que el magisterio cubano fue donde se depositó el sentimiento nacional y patriótico en años de tribulaciones.
“Cada cubano, cada obrero, cada familia, sentía el orgullo de tener una hija maestra normalista porque ser maestro era tenido en la sociedad con alto aprecio y estima, no así con una alta remuneración, pero al final de todo debo pensar que ningún aumento salarial compensaría la gratitud que debemos a aquellos que se consagraron a darnos clases, a acariciar nuestra cabellera, a tolerar nuestras lágrimas cuando fracasábamos en un empeño”.
En varios momentos hizo alusión a su madre —“que ya no está”—, y recordaba sus palabras cuando ella le decía: “Hijo estudia para que no pases lo que yo pasé”.
Y más adelante subrayó la importancia de reafirmar los valores sobre los cuales se levanta la dignidad nacional. “Es necesario hoy más que nunca hacer elogio de la virtud ciudadana, no caer en la comparsa de hablar de que todo está perdido, que todo tiempo pasado es mejor, que la juventud ya no es como aquella.
Si queremos hacer algo de verdad por Cuba levantémonos, levantemos la frente y aceptemos que llevamos en ella la estrella solitaria, enfatizó.
Presentes también en el acto José Ramón Fernández Álvarez, asesor del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, así como los ministros de Cultura y de Educación Superior, respectivamente, Abel Prieto Jiménez y José Ramón Saborido Loidi, entre otras personalidades.
Que bueno que le hayan otorgado esa Distincion a Eusebio Leal en vida. Desgraciadamente esta valiosisima figura cubana ya presenta en su fisico las huellas de la enfermedad que lo apartara de nosotros.