Por estos días de Juegos Olímpicos no solo las actuaciones de los atletas son noticia. Río de Janeiro estuvo este martes en muchas televisoras y periódicos cuando se conoció del ataque a un autobús que trasladaba a periodistas entre el complejo deportivo de Deodoro y el principal centro de prensa en Barra da Tijuca.
Aún se desconoce si el impacto que rompió algunos vidrios del vehículo fue causado por balas o piedras. Lo que sí es seguro son las heridas de dos corresponsales que por suerte no pasaron de cortes mínimos como consecuencia de esquirlas de vidrio
El lugar del hecho lleva el nombre de Curicica, muy cerca de Ciudad de Dios, una favela con altos índices de violencia. Después del incidente y para evitar sucesos similares en el futuro, la policía local aumentó el patrullaje en la zona.