El amable cartero de mi zona de residencia, quien también distribuye los periódicos del día, trajo ayer dos noticias: una mala y una buena.
¿Cuál prefiere conocer primero?… “La mala”, diría usted, como elige casi todo el mundo ante la disyuntiva.
El diario Granma, en su página cinco, reseñó la nota referida a “un grupo de delincuentes que pretendió introducir droga en Cuba, procedente de Jamaica”.
En información ofrecida por la Dirección Nacional Antidroga (DNA) se da cuenta que “las acciones fueron desplegadas en las provincia de La Habana y Granma” y posibilitaron obstaculizar la entrada de lanchas rápidas provenientes de territorio jamaicano, ocupar una considerable cantidad de dólares e incautar 295,24 kilogramos de marihuana.
Fueron procesados y acusados 11 ciudadanos, mayoritariamente jóvenes, los que recibieron condenas de entre 15 y 30 años de privación de libertad.
¿Cuáles hubiesen sido las consecuencias sociales si esa cantidad de marihuana entra al país y es distribuida? ¿Cuánto daño hubiese causado? Resulta doloroso pensar que hay quienes no miden las secuelas de sus actos y que solo tienen en cuenta las ganancias financieras. Es muy lamentable.
La buena
Y ahora, la buena: El semanario 5 de Septiembre, el mismo día, informó en su segunda página que cuatro pescadores de la provincia de Cienfuegos, mientras navegaban mar afuera como parte de sus faenas cotidianas, avistaron tres bultos flotando sobre el agua. Los subieron a la embarcación y protegieron debidamente. Ante la sospecha de que fuera droga llamaron de inmediato a autoridades de las Tropas Guardafronteras (TGF). Las que comprobaron que se trataba de 77 kilogramos de marihuana.
Carlos Rafael Montalván Casales, capitán de la embarcación, manifestó al respecto: “Tengo hijos y no me gustaría verlos inmersos en el consumo de drogas”. La tripulación la integraban también Jan Cruz González, Vladimir Marín Ramírez y Yirobis Toledo Álvarez.
El Héroe Nacional José Martí dejó escrito para la posteridad: “En el mundo ha de haber cierta cantidad de decoro, como ha de haber cierta cantidad de luz”.
Factores
En una intervención de Abelardo Moreno, viceministro cubano de Relaciones exteriores, sobre el enfrentamiento a las actividades ilícitas en materia de drogas, expresó que existen varios factores que exponen a Cuba a los peligros del tráfico de estupefacientes.
El factor primario resulta su posición geográfica en el Caribe en un lugar clave como una de las principales rutas entre países productores y el primer consumidor del mundo.
Otros que vienen actuando en los últimos años son: El desarrollo del turismo en nuestro país, la apertura a la inversión extranjera, y el incremento y diversificación de las relaciones comerciales.
Cabe destacar que actualmente existen 11 aeropuertos internacionales y 10 marinas, así como 6 puertos con operaciones comerciales importantes.
Desde el mismo 1959 comenzó a aplicarse una política en Cuba contra el tráfico de drogas. A través de estos años hemos ido solidificando nuestra estrategia de prevención y de enfrentamiento.
La protección de nuestra sociedad contra este flagelo ha sido en todo momento un elemento fundamental.