Parecen ser evidentes las diferencias entre los relatos de ciencia ficción escritos por hombres y los creados por mujeres. Así puede comprobarse con la lectura del volumen titulado Deuda temporal, antología de narradoras cubanas de ciencia ficción (Colección Sur Editores, Festival Internacional de Poesía de La Habana, 2015, 272 pp), que ha preparado Raúl Aguiar.
Son treinta y uno los textos antologados en esta obra –que firman igual número de autoras—, fechados desde los años 80 de la pasada centuria hasta la actualidad. Narraciones que permiten un enriquecedor acercamiento a un género de incuestionable alcance dentro de la creación literaria de la Cuba de entre siglos.
«La anunciación», de Daína Chaviano (La Habana, 1957), es la narración seleccionada para abrir la colección, pues –en criterio de Raúl Aguiar— la historia de la ciencia ficción escrita por cubanas se inicia cuando esta creadora alcanza, en 1979, con su libro Los mundos que amo, el Premio David del género.
Como cierre de esta antología, aparece el relato «Se aleja el invierno…», de la autoría de Laura Azor Hernández (La Habana, 1987), bióloga de profesión, quien se ha interesado en los temas ecológicos y de protección del medio ambiente, así como en el cultivo de la ciencia ficción.
Entre una y otra narración, es posible leer textos de escritoras de diversas generaciones, estilos y tendencias, entre ellas Chely Lima, Gina Picart Baluja, Duchy Man, Anabel Enríquez, Evelín Pérez, Ida Mitrani, Jamila Medina, Yamila Peñalver Rodríguez, Marié Rojas Tamayo y Elaine Vilar Madruga.
Revelador resulta «Sobre una deuda», texto introductorio al volumen, en que el narrador Raúl Aguiar, en breve y documentada investigación, analiza los rasgos esenciales que caracterizan, a lo largo de las últimas décadas, el discurso narrativo femenino de ciencia ficción en Cuba.
En ese prólogo, el también profesor de técnicas narrativas del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso asegura:
(…) podrían establecerse ciertas características específicas que, a lo largo de la historia del género en la isla, han definido y diferencian la ciencia ficción cubana escrita por mujeres de la elaborada por sus homólogos masculinos. En el aspecto formal, un mayor cuidado del lenguaje, voluntad de estilo con recursos a lo poético, y gran precisión a la hora de describir los ambientes y caracteres. Mayor profundización en la psicología de los personajes, sobre todo los femeninos y los infantiles. El aspecto especulativo, científico o tecnológico del argumento no es lo más importante en comparación con los conflictos e interrelaciones sociales, familiares o de pareja.
Deuda temporal, antología de narradoras cubanas de ciencia ficción es un libro que, con toda justicia, debía, desde hace años, haber sido pensado y creado. Así se hubiera reconocido desde mucho antes, como es ahora ya realidad, la deuda de la historia literaria de la isla con esas cubanas que han escrito –y escriben— ciencia ficción.
