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La Gallega de Artes Gráficas

Foto: Lourdes Rey
Foto: Lourdes Rey

 

Si usted pregunta en Santa Clara por Lina Grisel Carvajal Álvarez nadie sabría decirle quién es, pero si dice “la Gallega” y acota que se refiere a la de Artes Gráficas le llevan, sin pensarlo, hasta su encuentro.

La Gallega es una mujer conocida en esta ciudad del centro de Cuba. Desde hace 55 años por sus manos han pasado miles de modelos, libros, documentos, folletos, tesis de estudiantes, médicos, ingenieros, licenciados… para ser encuadernados.

“Hasta hace poco este era el único lugar donde se hacían esas labores y era yo una de las pocas personas que lo realizaba”, dijo con orgullo porque sabe que ha ayudado a que muchos de los exponentes del talento creador de la provincia culminen sus estudios satisfactoriamente.

Viene de una familia española, al padre le decían “el Gallego”, de ahí su apodo. Desde los 13 años está entre la imprenta, la encuadernación y otros menesteres de la industria gráfica. “No tenía edad para trabajar, pero venía, miraba cómo se hacía cada paso del proceso y aprendía, me gustaba, bueno, me gusta, y tanto que no sé vivir sin hacer esto.

“Era una niña, pero que más daba si antes de la Revolución hacía de todo después que salía de la escuela para ayudar a mi familia, así que cuando tuve edad me quede aquí y para siempre”. Dice esta frase y recuerda a la madre, al padre, al resto de la familia que siempre vieron en ella un apoyo importante y estuvieron orgullosos de que fuera una mujer curiosa, dedicada e inteligente, capaz de dirigir los procesos de la gráfica con la experiencia adquirida empíricamente.

Cuando la edad lo permitió se quedó fija en el taller, al que ha dedicado cinco décadas y medias de su vida. Comenzó como ayudante de encuadernación, presillaba, empaquetaba, engomaba, hasta que llegó a ser jefa de brigada y atender la producción, función que realiza actualmente con eficiencia.

Tiene también anécdotas que la marcaron profundamente y la han acompañado en la vida: “Un día estaba intercalando siete hojas de papel cebolla a un documento, esa es una de las labores que más precisión requiere y es absolutamente manual, de pronto siento que en el taller se hace un silencio total y era que el Che había llegado al local de forma inesperada. Estaba detrás de mí observándome. Miré, me sonreí levemente, el me miró de forma dulce diría yo. Me concentré, seguí haciendo lo mío y diciéndome para mis adentro: No puedes equivocarte Gallega, no te equivoques, precisa y segura que tú sabes hacerlo. Eran muchos documentos y el seguía ahí detrás de mí, cuando termino respiro profundo. Es entonces que me dice: ´Usted es una leona´, me abraza. Ese recuerdo me acompaña siempre, forma parte de mi historia personal”, mientras narra sus ojos verdes de abuela sabia están humedecidos, es visible en ella la emoción a pesar del tiempo transcurrido.

Aseguran los que la conocen que es una mujer incansable, tiene la habilidad de ahorrar la materia prima, de inventar qué hacer con los recortes  de papel, cartulina, cartón…Y sacarles el máximo a las viejas máquinas.

“Es que los años no pasan por gusto, hemos tenido momentos de mucha tensión laboral que solo se han podido vencer con el ingenio creador, sacar un talón de la nada, un modelo, un bloc de notas, una libretita que es útil, buscar soluciones a mucha de la maquinaria que es ya obsoleta, hemos tenido que reinventarnos todos los días para sacar afuera la producción”, reconoció.

Para muchos fue una sorpresa verla aprender y trabajar con destreza en la nueva tecnología. “Cuando llegaron las primeras máquinas me dije, a estudiar y aprender que este es el futuro. Trabajo en una computadora como cualquier joven, he visto cómo ha sucedido el avance tecnológico en esta rama y los cambios han ido ocurriendo conmigo, así que no era nada que no hubiera tenido que hacer antes”, se ríe, es una sonrisa cómplice, porque a veces es ella quien encuentra las soluciones delante de la impresora más sofisticada.

Artes Grafica  Villa Clara, perteneciente a la Empresa Viclar de la industria local, es una entidad destacada del territorio. La Gallega integra la nómina de los mejores trabajadores de ese sector y ha recibido distinciones y reconocimientos de su sindicato por su laboriosidad, empuje y dedicación al trabajo.

 

 

 

 

 

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