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Tabúes vs. Bienestar: Cáncer de próstata

En el departamento de Medicina Nuclear del hospital espirituano realizan mensualmente alrededor de 100 determinaciones del PSA.. Foto: Elisdany López Ceballos
En el departamento de Medicina Nuclear del hospital espirituano realizan mensualmente alrededor de 100 determinaciones del PSA.. Foto: Elisdany López Ceballos

 

“Un evento agresivo sobre la próstata fomenta modificaciones malignas,  por eso el uso de cojines con abertura  ayuda a evitar la prostatitis o inflamación de la mencionada glándula.  Este padecimiento no necesariamente  deviene cáncer, por tanto la mejor manera de prevenir la temible enfermedad es chequeándose anualmente”.

Tras esta afirmación de Yiliam Castro Mericy, especialista en Medicina General Integral y Oncología Clínica, específicamente en tumores periféricos y uroncología, solo puedo pensar  en que muchos hombres se preocupan  por comprar este tipo de asiento para  sus bicicletas y no por realizarse estudios como el Antígeno Prostático Específico (PSA) o el tacto rectal.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el prostático se registra como el segundo tipo de cáncer que más afecta a los hombres en  el mundo y su detección temprana es  la única manera de sobrevivirlo.

Acercamientos

Más frecuente en quienes entraron en la sexta década de vida y ahora con tendencia a aparecer en grupos etáreos entre los 50 y 55 años, el cáncer  de próstata responde a la enfermedad maligna que afecta esa glándula  perteneciente al órgano reproductor  masculino.

“El adenocarcinoma de próstata es lo más común en la histología, sin embargo, el paciente puede presentar tumores como los neuroendocrinos, que llegan a tener un mal pronóstico. En oncología existen muchas enfermedades cuyo inicio es asintomático por  cuanto debutan en etapas avanzadas.

“Los hombres que llegan a nuestras consultas refieren trastornos  obstructivos urinarios, el chorro de  orina es débil y se bifurca, pueden  aparecer sangramientos, pujos o retención a la hora de verter ese líquido  que desecha nuestro cuerpo”, especificó Castro Mericy.

La especialista destacó además, que ante esta sintomatología, la persona pudiera presentar una próstata  aumentada de tamaño y sobrevienen  los seguimientos médicos. Dolores  en la región perineal y en los huesos  son frecuentes en caso de que la afección se haya extendido más allá de la  glándula prostática. Resulta común  que la metástasis en este tipo de cáncer se manifieste en las estructuras  óseas, aunque puede aparecer a niveles hepático o pulmonar.

“Muchas veces los pacientes comienzan a sufrir dolores en los huesos  y cuando buscamos el tumor primario,  estaba en la próstata”, aclaró la especialista. Aunque existen afectados  con historia de este tipo de cáncer en  familiares de primera línea, díganse  padres o hermanos, la predisposición  genética influye pero no es determinante. Las prostatitis crónicas y los traumatismos pueden desencadenar el mencionado padecimiento.

Para un diagnóstico completo

Mucho hemos recalcado en estas páginas las garantías de un diagnóstico  temprano; para esta enfermedad eso  también es una carta de triunfo:

“El Antígeno Prostático Específico es un método ineludible en la  prescripción del carcinoma de esa  glándula, en el establecimiento del  estadio de la enfermedad y en el monitoreo de la terapia”, definió Mario  González Rodríguez, licenciado en  Radiofísica Médica y jefe del departamento de Medicina Nuclear del  Hospital General Universitario Camilo Cienfuegos, de Sancti Spíritus.

Según la propia fuente, “en la atención primaria se utiliza el Sistema Ultra Micro Analítico (Suma)  para hacer los pesquisajes a pacientes de más de 40 años que posean indicaciones médicas. Así, en nuestro  centro asumimos ensayos clínicos de  cáncer de próstata y repetimos los  análisis cuyas pruebas previas develan  índices alterados”.

Yiliam Castro alerta sobre la tendencia de encontrar índices alterados del PSA en pacientes de 40 a 55 años. Foto: Elisdany López

 

En la región central del país, solo Villa Clara y Sancti Spíritus cuentan con el servicio de Medicina Nuclear. En esta última provincia practican alrededor de 100 determinaciones  mensuales y desde el 2011 ofrecen esta posibilidad a la población. Pero, ¿solo el PSA aporta datos suficientes para completar el dictamen de los especialistas?

“Si bien el PSA resulta esclarecedor en la formación de un criterio, el tacto rectal también lo es. El  mencionado procedimiento permite  al doctor conocer las características  físicas de la glándula. Además, este  puede elevarse por causas que no  necesariamente responden a un cáncer, entre ellas la hiperplasia benigna, las relaciones sexuales, infartos  prostáticos, cuando la persona se somete a manipulaciones por prácticas  como el sondeo o cuando padece de  prostatitis. Por tales razones, ambos  métodos arman el cuadro clínico del  afectado ante nuestros ojos”, aclaró  la oncóloga Yiliam Castro.

Tanto la cirugía como la radioterapia devienen tratamientos básicos,  aplicables en etapas tempranas de la  enfermedad. La intervención quirúrgica es amplia porque supone una  prostatectomía radical, donde los  médicos extirpan la glándula prostática y algunos tejidos en torno a ella, por tanto resulta imprescindible que la enfermedad esté localizada.

De acuerdo  con la opinión de los expertos, los tumores de próstata pueden calificarse como “nobles”  porque, en general, responden rápidamente a terapias hormonales. En  Cuba emplean el zoladex o las conocidas vacunas en el ombligo que se  indican trimestralmente por períodos de un año o dos. El casodex, unido a ciertos antiandrógenos como la  bicalutamida o la flutamida también  se utiliza para contrarrestar  el mal.

“Cuando los índices de PSA vuelven a la normalidad detenemos el  tratamiento y, pasado un tiempo, lo  reiniciamos. De esta manera, evitamos que la dolencia se haga hormonoresistente. En ese punto, cambiaríamos los medicamentos y en pacientes  muy sintomáticos y polimetastásicos  utilizaríamos la quimioterapia”, advirtió la especialista consultada.

 Sin prejuicios

Para el año 2030 en el mundo prescribirán 22 millones de casos de  cáncer. Así lo reconoce la OMS y subraya el notable crecimiento que sobreviene si añadimos que en el 2012  existían 14 millones de enfermos por  esta causa. Ante las abrumadoras  estadísticas solo nos queda, a través  de la prevención, poner el tiempo a nuestro favor.

De acuerdo con Castro Mericy: “Un descubrimiento precoz del cáncer de próstata posibilita la evolución  satisfactoria del aquejado. Sin embargo, aun cuando se diagnostica tardíamente, el pronóstico es optimista  para quienes lo padecen, siempre que  no hagan resistencia al tratamiento  hormonal. Incluso, los pacientes que  debutaron en una fase adelantada  pueden sobrevivir de 5 a 10 años”.

Llevar una dieta sana, practicar ejercicios, no fumar ni ingerir bebidas alcohólicas, son medidas que  siempre favorecen a nuestro organismo. Evitar traumas en la glándula  prostática es una recomendación válida para los hombres, pero todos los  expertos convergen en que la mejor  manera de no sufrir la temible afección es chequeándose cada año.

Castro Mericy concluyó: “Tenemos que acabar con los prejuicios todavía existentes en torno a la práctica del tacto rectal, sobre todo por las  alarmantes cifras de hombres jóvenes  con alteraciones prostáticas. Este procedimiento médico, unido al PSA, le  da la oportunidad al paciente de ganarle la partida a la muerte y, cuando  la salud está en juego, los tabúes no  deberían constituir un freno”.

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