En la misiva, firmada por su directora, la Máster en Ciencias Irma Horta Mesa, concuerda con el reclamante acerca de la importancia de saber distinguir lo que carece de valor de lo que tiene un mensaje y una trascendencia artística sin diferencias de géneros en cuanto a la música, o cualquier manifestación del arte.
Explica que a mediados de enero de este año, luego de conocer varios criterios sobre la baja calidad de algunas presentaciones artísticas, sus implicaciones y visto el parecer de especialistas, decidieron enviar una comunicación a las máximas autoridades de las instituciones y a los directores municipales de Cultura abordando el tema con profundidad.
El escrito deja claro que “es nuestra responsabilidad, en primer orden, responder a la política cultural de esta nación como instrumento ideológico y de conformación de valores identitarios”. Para lograrlo, afirma Horta Mesa, orientamos a los miembros de las comisiones de Recreación y de Cultura-Turismo, asesorar y definir estrategias en sus respectivos equipos de trabajo con el fin de no permitir que la chabacanería y el mal gusto sean promovidos por nuestro sistema institucional y, a su vez, sumar al resto de los organismos a tal empeño.
Aclara también que cualquier posible presentación pública en los territorios puede ser consultada con la Dirección Provincial de Cultura.
Sin embargo, recalca que nunca habrá interés en refrendar actuaciones que no hagan algún aporte desde el punto de vista cultural. Asimismo, llama a los directivos del sector a hacer valer su autoridad con razonamientos y diálogo fecundo y a que asuman con valentía el concepto que tienen que proteger.
Según entendemos de las letras de la directiva, la decisión de eliminar el reguetón de los espacios culturales no es absoluta y ni siquiera ha sido abordada como normativa legal. Se trata —afirma— de que cada uno de los especialistas y responsables de las actividades luchen contra la mediocridad, suspendan lo que no sirve y promuevan a aquellos que cultivan valores culturales.
Clara y meridiana la respuesta de la directora provincial de Cultura en Camagüey. Falta por ver si tratando de cumplir lo establecido, algunos mantienen la concepción equivocada de botar el sofá sin el necesario diálogo y análisis casuístico.