Los estadounidenses se ven imposibilitados de emplear los productos cubanos para combatir o tratar el cáncer debido a las restricciones que impone el bloqueo, aseguró Agustín Lage, director el Centro de Inmunología Molecular, organización puntera de la industria biotecnológica cubana y del complejo empresarial Biocubafarma.
Ambas naciones tienen una estructura demográfica y de salud muy similares, reflexionó el científico, pues ambas sociedades han evolucionado hacia el envejecimiento poblacional y la extensión de las expectativas de vida, por lo que un dialogo entre las respectivas industrias podría tener un gran impacto en las dos naciones.
A partir del 17D se hn intensificado las conversaciones y estas deben llevarnos hacia dos puntos de inflexión que serían mutuamente beneficiosos: el uso legal de los productos cubanos en Estados Unidos, y que la colaboración entre las instituciones rebase el ámbito académico para llegar, incluso, a la creación de empresas mixtas.
Aun en el contexto de las diferencias que han generado los últimos años de historia, los avances en materia biotecnológica en Cuba podrían ser importantes puntos de contacto, insistió Lage y reiteró que los laboratorios cubanos están abiertos a las instituciones certificadoras de EE.UU.
Informó además que productos patentados en la isla como la vacuna contra uno de los tipos de cáncer de pulmón, y los anticuerpos monoclonales, están listos para entrar a pruebas clínicas en la nación norteña este mismo año.
Lage comentó además que Biocubafarma agrupa a 32 empresas y 8 comerciales, las cuales manejan 70 fábricas en las que laboran más de 22 mil trabajadores. Las exportaciones de este grupo llegan a más de 50 países.