La tercera edición de la Feria Nacional de Negocios, prevista para celebrarse del 21 de marzo al 11 de abril, será una oportunidad de interacción entre los principales actores económicos del país para avanzar en las conciliaciones de las producciones y servicios que garanticen las reservas del plan para el 2017.
Más allá de incrementar los indicadores y las capacidades a partir de nuestros propios recursos, las pretensiones del próximo año apuntan a un mayor crecimiento en función de la producción y de la disponibilidad de recursos internos y externos, según expresó a Trabajadores René Hernández Castellanos, viceministro de Economía y Planificación.
Este aseguramiento permitirá proyectar el presupuesto de las más de 2 mil empresas estatales nacionales, las que cuentan con normativas que les transfieren mayor solvencia financiera para cumplir sus propósitos. Algunas de las resoluciones están dirigidas a la descentralización de las facultades y que en este tercer encuentro centrarán un programa paralelo de conferencias y seminarios de especialistas para intercambiar con los empresarios y los trabajadores no estatales que esta vez también participan.
Con vistas a contribuir al perfeccionamiento del sistema empresarial es necesario ser eficiente no solo en la reducción de costo de las producciones, sino en el aprovechamiento del proceso de innovación y aplicación de nuevas técnicas para potenciar el encadenamiento productivo, explicó el vicetitular.
Determinar oferentes y demandantes
Aun cuando este evento, que tendrá lugar en Expocuba, no constituye el único escenario de intercambio del empresariado cubano, posibilitará avanzar en negociaciones y determinar ofertas y demandas.
Agregó Hernández Castellanos que conocer el mercado nacional contribuirá a sustituir importaciones y garantizar la capacidad de respuesta con nuestras propias producciones, sin acudir a un financiamiento externo. Mencionó como ejemplo el turismo “que importa un significativo nivel de insumos asociados a vajillas, a la gastronomía y a los servicios, y que en ediciones anteriores ha identificado a proveedores nacionales, lo cual permitió sustituir importaciones, sobre todo en la industria del plástico y en la construcción de techos”.
Es importante asegurar este principal rubro de ingresos en divisas al país, en el que hay que disminuir el componente de importación en la conformación del PIB, lo cual se logra siendo más eficiente y capaces de competir con esa producción y servicios externos, según comentó.
Explicó que incentivar otros sectores económicos como la ligera y la pesada, la siderúrgica, la electromecánica y la electrónica, es otro de los retos del empresariado cubano ante el proceso de actualización del modelo económico y la víspera del VII Congreso del Partido Comunista de Cuba.
También es trascendental sostener el programa de alimentos, desde la producción agropecuaria en la tierra hasta que se complete todo el proceso de industrialización.
A tiempo…
Casi 160 empresas se han inscrito hasta inicios de la pasada semana, cifra que en la pasada edición cerró con alrededor de 300, que incluye las formas de gestión no estatal, las que esta vez están asociadas a las actividades de la construcción, la mecánica y los servicios.
“De una manera u otra todos los actores económicos se insertan en la Feria, unos por su capacidad de oferta y prestación de servicios, y otros que acuden como demandantes”, expuso el vicetitular, quien destacó la importancia de la participación de las entidades más cercanas a la producción.
“A través del movimiento sindical tenemos que promover el desarrollo de estos espacios de trabajo”, aseveró Hernández Castellanos, y resaltó que el acompañamiento a los directivos de los trabajadores con experiencia, los jóvenes y los aniristas se asocia al estímulo y al dominio de la labor de cada empresa en un espacio en que todos los actores económicos aportan a la economía del país.