El saludos de ambos equipos sobre el diamante, momento de particular simbolismo.
Una tarde memorable aquella del 28 de marzo en el parque Latinoamericano.
Hace 17 años, en la primavera de 1999, la principal selección cubana de béisbol se midió dos veces al equipo de Grandes Ligas Orioles de Baltimore, en jornadas memorables que paralizaron a la Mayor de las Antillas.
El 28 de marzo, en un repleto estadio Latinoamericano, la franquicia norteamericana se agenció cerrado triunfo de tres carreras por dos en 11 entradas. Días después, en el no menos mítico Camden Yard Park, de Baltimore, los cubanos se vengaron con pizarra amplia de 12 anotaciones por seis.
Más allá de lo sucedido sobre la grama de ambos escenarios, el suceso pasó a la historia como la primera vez que equipos de Cuba y la MLB se medían tras el Triunfo de la Revolución de 1959.
Aquella fiesta del béisbol, seguida gracias a la televisión y la radio por miles de seguidores en Cuba, Estados Unidos y más allá, prometía un acercamiento mayor que a la postre se frustró, entre otras razones porque George W. Bush asumió la presidencia en 2001 y lideró una feroz política de acoso hacia Cuba, que afectó entre otros los intercambios culturales, deportivos y estudiantiles que se habían podido lograr.
La posibilidad de que equipos cubanos y de Grandes Ligas se vieran las caras pudo cristalizar hacia la década de los 70, cuando las autoridades de la Isla mostraron su total acuerdo y fueron las norteñas quienes pusieron trabas y negativas que echaron por tierra la iniciativa.
Ahora, en el contexto del acercamiento entre ambos países que lideran los presidentes Raúl Castro y Barack Obama, cristaliza el tope entre una selección cubana y las Rayas de Tampa Bay, en el Latinoamericano el venidero 22 de marzo a las 3 PM. Será un acontecimiento memorable que ojalá de paso a una relación más fluida entre el béisbol cubano y la MLB.
Mientras eso sucede disfrutemos algunas imágenes memorables de lo sucedido hace casi 17 años.
La presentación del duelo hizo estallar de júbilo a los presentes en el Latinoamericano.
Imagen del partido histórico entre Cuba y Orioles de Baltimore, el 28 de marzo de 1999, en el estadio Latinoamericano.
Una tarde memorable aquella del 28 de marzo en el parque Latinoamericano.
El saludos de ambos equipos sobre el diamante, momento de particular simbolismo.
El saludos de ambos equipos sobre el diamante, momento de particular simbolismo.
Peter Angelos, propietario de los Orioles; el Comandante en Jefe Fidel Castro; y Bud Selig, comisionado de la MLB.
Fidel Castro dialogó con los peloteros de ambos equipos y se mostró muy amistoso con los visitantes.
El presidente cubano, Fidel Castro, saludó al propietario del equipo Orioles de Baltimore, Peter Angelos, en el Palacio de la Revolución el sábado 27 de marzo, un día antes de partido. Foto: AP
Omar Linares y Cal Ripken, las figuras icónicas del tope.
Omar Linares y Cal Ripken, las figuras icónicas del tope.
La presentación del duelo en Baltimore.
Otro saludo memorable, ahora en el Camden Yard. Cal Ripken a la derecha.
Un detalle del partido en Estados Unidos.
Scott Kamieniecki, uno de los lanzadores utilizados por Baltimore ante Cuba en el segundo partido.
Una jugada del torpedero de Baltimore
La lluvia se enseñoreó en Baltimore, pero el juego finalizó tras una interrupción de casi una hora. Linares al bate.
José Ariel Contreras abrió el duelo en Baltimore.
Andy Morales celebra jonrón en partido celebrado en Baltimore.
Cuba celebra victoria en el Camden Yard de Baltimore.
Atuendos utilizados en Baltimore, durante el segundo partido.
Boleto de entrada al Camden Yard en Baltimore.
El árbitro cubano Cesar Valdés respondió enérgicamente a la provocación de un contrarrevolucionario.