Hace cuatro años que Susana de la Caridad Alfonso García vive la peor la pesadilla con su familia.
Junto con dos hijas y su madre de 80 años habita en el número 6708 de la calle 122, en Marianao. Allí ocupan el apartamento tres, donde recién llegadas empezaron a sufrir por las tupiciones en el baño, que ocasionaron filtraciones a la vecina.
Durante tres meses tuvieron que reparar, o desbaratar para ser más exactos, y hacer nuevas instalaciones hidráulica y sanitaria. La felicidad duró poco. Solo 15 días. Luego regresó el problema aunque sin consecuencias para la señora de los bajos. La situación no ha cambiado desde entonces.
Repetidas visitas a la Unidad Municipal Inversionista de la Vivienda (Umiv) dieron como resultado que “se ha vaciado la fosa del edificio y escombrado la misma”, pues seis veces acudió el camión de alta presión, con el cual “resuelven por dos o tres meses aproximadamente”, confirma.
Por desgracia, la conexión general del inmueble está muy dañada y ello se ha agravado con el empleo del citado equipo, al punto que los encargados de hacer el trabajo no se atreven a continuar realizando el procedimiento por temor a destruir la tubería sanitaria y crear problemas constructivos en la estructura de la edificación.
La solución: cambio de línea, de conexión general. Eso es lo aconsejado por los especialistas. Eso es lo solicitado por los vecinos en dos ocasiones ante la Umiv, la más reciente en septiembre del 2015. Nunca han recibido respuestas, expone la lectora.
A la falta de atención se suma una convivencia tensa. El baño de la casa de Susana no cumple la función que debería. Usarlo en cualquier momento podría provocar el vertimiento de las aguas negras y desperdicios por el “boquete abierto en la escalera, el cual no se ha sellado por las veces que hay que pasar la manguera del camión de alta presión”.
Habla de la escalera que utilizan los vecinos diariamente, sobre todo quienes habitan en esa ala del edificio, entre ellos “cuatro menores, una persona con una penosa enfermedad terminal y una anciana de 95 años”, especifica la aquejada. Su paciencia fue puesta al límite por el resultado de la última visita a la Umiv. Su hija mayor hizo la gestión el pasado 8 de enero, pues necesitaban que volvieran a destupir, pero le anunciaron que en esta ocasión el servicio costaría 117.07 CUP.
El precio fue fijado “sin mediar el pesquisaje técnico establecido en el lugar”,expone la remitente, quien tiene entendido que a partir de este trámite cobran un porcentaje, de acuerdo con los metros lineales de la manguera que utilicen. ¿Cómo es posible que la técnica pueda determinarlo desde su oficina y sin haberse movido del asiento?, inquiere.
Parece que el detonante para escribir la carta lo pusieron los operarios del camión, quienes al llegar al edificio ni siquiera bajaron del carro y alegaron que “aquí no se pasa más alta presión, eso lleva cambio de línea, resuélvansela como puedan…”, subraya.
Mientras tanto, Susana sigue evitando el baño de su casa. Jabas de nailon y orinales han sustituido las funciones del mueble sanitario. Lo preocupante es que no sabe por cuánto tiempo se mantendrá así.
Bueno, esto de Susana es lamentable y no me deja esperanza ninguna a que mi problema se resuelva. Tampoco tengo la esperanza de que se me publique este comentario. El núcleo familiar de la viuda de mi padre y el mío (ambas colindamos) estamos sufriendo desde hace ahorita dos años otro problema parecido con nuestros techos que, -dicho sea de paso- somos propietarias y no vivimos en un edificio múltiple. Las Direcciones municipales de la Vivienda y de Planificación Física, así como el Consejo de la Administración, todos del municipio de La Habana Vieja, así como las instancias provinciales y nacionales, llevan todo este tiempo -pese a las innumerables quejas, reclamaciones y denuncias- sin atendernos ni darnos una solución y una respuesta ajustada a derecho en cuanto a la ilegalidad mantenida por estos organismos sobre nuestras viviendas provocando la obstrucción de los bajantes pluviales de nuestros techos debido a su utilización como desagüe de albañales, filtraciones, rajaduras, desconchados y abultamientos en el interior de nuestros dormitorios de techos de viga y losa, hasta se tuvo que clausurar uno de ellos, lo que motivó que mi hijo, su esposa y bebé de seis meses de nacido tuvieran que abandonar el hogar. Estas entidades mantienen una habitación de madera cuya construcción comienza sobre portal hacia la vía principal de la calzada de Monte y se ha extendido con construcciones ilegales sobre el área común de nuestras casas. Muy a pesar de los Dictámenes Técnicos que poseemos que son claros al recomendar como solución única y adecuada de viabilizar estudio del traslado del núcleo existente constituido por una (1) persona hacia un área con uso habitacional con las condiciones mínimas funcional habitable, atendiendo a la tipología del núcleo y que la afectación es hacia dos viviendas en propiedad cuyos núcleos están constituidos, uno de cinco (5) y el otro de tres (6) personas, además de estar violando nuestros derechos de propietarias e impidiendonos y negándonos los proyectos de construcción solicitados para la rehabilitación y reparación de nuestras viviendas, lo cual también es una violación a nuestros derechos. Ya no tenemos a donde quejarnos porque ya lo hemos hecho a todas las instancias de gobierno y partidista e incluso le solicitamos una entrevista al Presidente del Instituto de Planificación Física y nos la denegaron sin razón alguna. TODOS se tiran el problema de un lado a otro. Hemos realizado acciones escalonadas y adecuadas y pacientemente hemos esperado y nada. Con estas acciones, hemos confeccionado un expediente con fotos de las afectaciones listo para el que lo quiera revisar. Tampoco la Fiscalía, -ni Municipal ni provincial- se pronuncian sobre nuestras quejas y denuncias. ¡Qué podremos esperar para nosotras Susana!.
Lo que más me duele de todo esto, es que cada día me siento más desesperanzada y desilucionada, con temores a que un día amnezcamos sin techo y lamentando pérdida de vidas humanas, que lógicamente serán los mios porque ambos núcleos afectados somos familias. Los ilegales disfrutando nuestros derechos y las ilegalidades autorizadas campeando por su respeto.
No pude seguir leyendo porque me indigne con lo que le sucede a esta familia que no es la unica, debia darle verguenza a los dirigentes de que hayan familia que viven en esas inmundicias, y vas al area turistica y parese que llegaste a otro pais, estoy asqueada de tanto abuso y tanta crueldad, cuatro años se dicen muy facil lo que hay que vivirlos, verdad que hay personas que no le corren
sangre por las venas, porque aguantar cuatro años sin dar un mitin relampago en el centro d del vedado, en el cohiba para que no esten dando una imagen de buena gente y preocupado por el pueblo, se muy bien que esto no lo publicaran pero tenia que descargar la soberbia de ver tanta injusticia mientras que la cupula viven como reyes, hasta cuando podran los seres humanos aguantar tanto abuso.
ESCUCHEN CONSEJOS ESTAS LECTORA RESOLVIO EL PROBLEMA IDEM AL DE USTEDES CON SOSA CUTICA SE LE DEPOSITA A LAS POSETAS DE NOCHE ANTES DE ACOSTARSE AL AMANECER SE DESCARGA YO TUVE ESA SITUACION GRAVISIMA ASI QUE ACTUEN Y RECORRAN LABORATORIOS PARA VER QUIEN SE APIADA DE USTEDES Y LOS AYUDA POR LO MENOS DEBE SER 7 NOCHES SEGUIDAS PARA QUE DESBARATE EL CALCIO, OBSTRUCCION POR GRASA, HECES Y ALGUNA QUE OTRA PRENDA QUE ESTE OBSTRUYENDO SE ACORDARAN DE MI……………