En Santa Isabel de las Lajas, pequeña localidad de la provincia de Cienfuegos, parece como si el tiempo se hubiese detenido, en reverencia al más ilustre de sus hijos: Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez, conocido mundialmente como Benny Moré, el Bárbaro del Ritmo.
El 19 de febrero de 1963 dejó de existir físicamente, víctima de una enfermedad hepática. Pero en su paso por la vida dejó una gran estela de bellas creaciones musicales, interpretadas con una voz única e inigualable, y muchas amistades que lo veneran como lo que fue: todo un caballero.
La población lajera peregrinó temprano hasta la tumba donde yacen sus restos en el cementerio municipal y sobre su tumba fueron colocadas flores.
La dirección de Cultura allí organizó y desarrolla este viernes un programa de actividades, y en el Casino de los Congos suenan los tambores Makuta, los mismos donde el Benny, siendo niño, puso sus manos como premonición divina de que sería un músico de tan altos quilates.
Los visitantes ocasionales o habituales visitan también el museo dedicado a él, donde se encuentran múltiples piezas vinculadas a su vida y obra.
En Santa Isabel de las Lajas parece que el Benny anda y desanda sus calles, saludando a los amigos, tomándose un trago en el bar de siempre y cantando y tocando la guitarra en el parque ubicado en el centro mismo de la localidad, porque ciertamente, él vive en su pueblo, en su rincón querido.
Acerca del autor
Graduado de Profesor de Educación General en el Instituto Superior Pedagógico Félix Varela, de Villa Clara, Cuba (1979). Ha laborado en la Revista Juventud Técnica, semanario En Guardia, órgano del Ejército Central, periódicos Escambray, CINCO de Septiembre y Granma. Desde el año 2007 es corresponsal de Trabajadores en la provincia de Cienfuegos. Está especializado en temas económicos y agropecuarios. En 1999 acompañó en funciones periodísticas a la segunda Brigada Médica Cubana que llegó a Honduras después del paso del huracán Mitch. Publicó el libro Verdades sin puerto (Editorial cubana MECENAS). Ha estado en otras tres ocasiones en esa nación centroamericana, en funciones periodísticas, impartiendo conferencias a estudiantes universitarios, asesorando medios de comunicación e impartiendo cursos-talleres sobre actualización periodística a periodistas y comunicadores. Multipremiado en premios y concursos internacionales, nacionales y provinciales de Periodismo. Fue merecedor del Premio Provincial Periodístico Manuel Hurtado del Valle (Cienfuegos) por la Obra de la Vida – 2012. Le fue conferido el Sello de Laureado, otorgado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura (SNTC). Mantiene evaluación profesional de Excepcional.