El concierto organizado en honor a su Santidad Kirill, Patriarca de Moscú y de toda Rusia, tuvo lugar en la noche de este sábado en el histórico Teatro Martí, al que asistió también el miembro del Buró Político y Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Con la interpretación de los Himnos nacionales de ambos pueblos dio comienzo la velada cultural a cargo del Coro del Clero de la Eparquía de Moscú, cuyos integrantes forman parte de la delegación que acompaña al Primado de la Iglesia Ortodoxa Rusa, de visita oficial en la Isla desde el jueves último.
El programa previsto incluyó, además, la actuación del Quinteto de solistas del Conjunto Académico Estatal Rusia, de Lyudmila Zykina y la solista Nadezhda Kryguina, quien interpretó magistralmente la canción Katyusha, del repertorio tradicional ruso.
Asimismo, el coro mostró su talento en la versión que hiciera en idioma español de la famosa Guantanamera, con versos de José Martí y música de Joseíto Fernández Díaz.
El concierto estuvo organizado por la Embajada de la Federación Rusa, los ministerios de Cultura y de Relaciones Exteriores y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana.
Estuvieron también presentes Julián González, titular de Cultura, otros representantes del país anfitrión, e integrantes de la delegación de la Iglesia del Patriarca de Moscú y de Toda Rusia.
Sobre el teatro Martí
El teatro Martí fue inaugurado el 8 de junio de 1884. Antes nombrado Irijoa, alcanzó gran aceptación popular por la programación de obras del teatro bufo cubano y su céntrica ubicación, a lo cual también contribuían sus apropiadas soluciones de diseño y tecnología.
El interior del inmueble, con columnas de hierro fundido, pisos de mármol, alfombras, cortinas, espejos y lunetas de hierro, ofrecía una mayor riqueza a la edificación patrimonial.
Luego de cuarenta años cerrado, el 24 de febrero del 2014 con la presencia del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, General de Ejército, Raúl Castro Ruz, se realizó su reapertura después de una reparación capital, y en el año 2015 le fue otorgado el Premio Nacional de Restauración
La función inaugural de esta nueva etapa incluyó un repertorio de lujo, con la interpretación de piezas antológicas dentro de la tradición musical cubana.
Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad de La Habana y artífice de este nuevo impulso a la recuperación de esta joya arquitectónica, calificó la apertura como un tributo pequeño y modesto a la obra de la nación cubana.
