Los resultados que arroja la VIII evaluación nacional a la producción local y ventas de materiales de la construcción, que se desarrolla en el país, muestran que se avanza en este estratégico programa dirigido fundamentalmente a la satisfacción de las necesidades de viviendas de la población.
Sin embargo, en el país subsisten muchas insatisfacciones relacionadas con la calidad con que se fabrican los productos y las fallas en la comercialización de los mismos. Bloques, mosaicos y otros elementos de paredes y techo que se rompen con facilidad por la mala calidad de los áridos están entre las principales cuestionamientos de la población.
Problemáticas reconocidas por los participantes en las conclusiones de la VIII evaluación realizada a la provincia de Guantánamo, presidida por Tomás Vázquez Enríquez, director nacional del programa de Producción Local y Ventas, quien insistió además en continuar trabajando el tema de los precios de los materiales y en la profesionalidad que debe caracterizar al personal que labora en los establecimientos donde se venden estas producciones.
En diálogo con la prensa el directivo señaló cómo el programa de materiales locales de construcción va aportando a la sustitución de importaciones del país, y ejemplificó con los tomacorrientes que ya se producen en las provincias de Cienfuegos y Villa Clara, y el falso techo de fibra de coco que se fabrica en Guantánamo.
Precisamente a la más oriental provincia cubana le fue reconocida sus avances en programa de materiales locales de construcción y ventas, por el sostenido incremento de sus capacidades productivas, dedicadas a la construcción de viviendas como importante indicador de desarrollo social.
Pero, aunque la provincia transitó de la categoría de Regular en la evaluación anterior a la de Bien en esta comprobación, aún se evidencian las potencialidades existentes para incrementar los genéricos y sus volúmenes productivos, y en el aprovechamiento y búsqueda de materias primas naturales, reciclables y desechos.