Los cancilleres y coordinadores nacionales de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) continuarán este lunes las reuniones preparatorias iniciadas ayer para revisar los documentos y declaraciones que serán debatidos por los mandatarios de la región.
Estos encuentros previos a la IV Cumbre de la Celac tienen lugar a puertas cerradas en la sede de la cancillería ecuatoriana en Quito, mientras que la veintena de presidentes y jefes de Estado que han confirmado su presencia se verán las caras el miércoles 27 en el edificio de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Ese día se adoptará una declaración política y varias especiales, entre las que destacan las propuestas por Cuba acerca de la condena regional a tres de los temas aún no resueltos en la relación bilateral de la isla con Estados Unidos: el bloqueo económico, comercial y financiero; la ocupación ilegal del territorio donde está la Base Naval de Guantánamo; y el trato diferenciado que otorga Washington a los migrantes cubanos.
Con especial tesón los ecuatorianos han defendido la Agenda 2020, cuyo texto contempla varios ejes de trabajo, entre ellos la erradicación de la pobreza extrema y la desigualdad, la educación, la ciencia y tecnología, la lucha contra el cambio climático, y el financiamiento para desarrollo e infraestructura.
También se espera la evaluación y firma de otros textos; se analizará cuál país tendrá la presidencia pro témpore durante el 2017; y se efectuará la ceremonia de entrega de Ecuador a República Dominicana, nación que rectorará los destinos de la Celac durante el 2016.
“Este miércoles, la patria se viste de gala con la cumbre de la Celac”, dijo Rafael Correa; mientras que para el canciller Ricardo Patiño, el evento “será una oportunidad más para que Ecuador demuestre ese espíritu integracionista, para que los países tengan la oportunidad de discutir de sus problemas y aspiraciones”.
