Los dos mejores judocas cubanos de la actualidad, Idalis Ortiz (+78 kg) y Asley González (90 kg) conquistaron sendas medallas de plata en el Grand Slam de Tokio, cierre de la gira asiática de ambas selecciones en busca de mejorar sus ubicaciones en el ranking olímpico.
Nuestra campeona olímpica y doble titular del orbe consiguió su mejor desempeño de las últimas tres semanas tras victorias convincentes por ippón ante la venezolana Emileidy López, la anfitriona Wakaba Tomita y la francesa Marine Erb, en tanto cedió en la final frente a la local Nami Inamori, la mejor ubicada de Japón con vistas a la cita cuatrienal, en el puesto seis de la lista universal.
Por su parte, el submonarca olímpico y oro mundial en el 2013, no creyó en ninguno de cuatro rivales que tuvo en su camino hasta la discusión de la dorada, cuando perdió por penalización 2-1 con uno de los ídolos locales, Mashu Baker, número dos de la división en la actualidad.
Otra actuación meritoria la aportó el plateado del mundo en el 2014, José Armenteros, séptimo en los 100 kilos, al caer por ippón con el georginano Beka Gviniashvili. La última representante cubana este domingo, Yalennis Castillo (78 kg), no pudo pasar de la primera pelea, tras encontrarse nada más y nada menos que con la fuera de serie de su categoría, la estadounidense Kayla Harrison, una de las tres que burló el dominio total de los japoneses en su evento rey.
Más allá del resultado cuantitativo y el sexto lugar general por naciones, los judocas cubanos regresan esta semana con un compromiso bien alto: asaltar la mayor cantidad de podios en el Grand Prix de La Habana, del 22 al 24 de enero.