Sin la participación protagónica de los trabajadores no es posible perfeccionar la obra de la Revolución, expresó Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Comité Central del Partido y secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba, al intervenir ante los delegados de la comisión número uno de la Primera Conferencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (SNTECD) que sesiona en el Palacio de Convenciones, en La Habana.
El también miembro del consejo de Estado abordó la importancia del funcionamiento de las organizaciones sindicales ─tema abordado en esta comisión─ y recordó que el escenario principal del sindicato es el centro de trabajo, donde se encuentran sus afiliados.
“Yo veo a este sindicato como abanderado del valor que tiene el conocimiento en el dirigente sindical”, afirmó Guilarte, quien subrayó la importancia de la preparación y capacitación de los cuadros sindicales para poder argumentar cualquier preocupación de los trabajadores y posibilitar que la asamblea tenga calidad.
Con la presencia de Ismael Drullet Pérez, secretario general del SNTECD, y de Ena Elsa Velázquez Cobiella y Rodolfo Alarcón Ortíz, ministros de Educación y Educación Superior, respectivamente, los participantes en la comisión número uno, debatieron ampliamente sobre el funcionamiento, asunto vital para ejercer con calidad el trabajo sindical.
Según se reconoció en el informe presentado, al cierre del año 2014, el SNTECD contaba con 499 mil 304 afiliados, de ellos, 483 mil 883 son trabajadores no estatales. “La sindicalización no se alcanza con formalidades, hay que discutirla y certificarla en la asamblea de trabajadores, entrevistarse en los colectivos, consagrar más tiempo a las secciones sindicales con mayores problemas y valorar los resultados a partir del incremento continúo y el aumento de los ingresos económicos mediante una gestión superior”, expresa el documento.
Al abordar el tema del funcionamiento, Carmen Sánchez, secretaria del buró sindical de la dirección provincial de Educación en la provincia de Santiago de Cuba, expresó que sin eso no puede hablarse del sindicato. Ella insistió en la importancia de tener un ejecutivo unido, pues todo el trabajo no puede recaer en el secretario general, como ocurre muchas veces.
Por su parte, Dimitri Álvarez, dirigente sindical en la Universidad de Artemisa, manifestó que es preciso asistir a los consejos de dirección, saber cómo y para qué se está empleando el presupuesto destinado al centro.
El joven Reinier Limonta, secretario sindical en la Facultad de Derecho, en la Universidad de Oriente, refirió que en un inicio le fue difícil realizar la tarea para la cual fue elegido. “La gente no iba a las reuniones, pero en la medida en que nos acercamos a los problemas de la gente, recibimos su apoyo, tuvimos resultados. “El sindicato tiene su esencia en la unidad y los problemas nos pueden parecer grandes, pero tenemos que ir acorralándonos y buscarles solución”, apuntó.
Luego de escucharlo, Ismael Drullet señaló que ve una fortaleza en los dirigentes jóvenes que hoy existen en varias universidades, y en ese sentido expuso que éstos deben aprovechar la experiencia de aquellos que durante años han cumplido esas funciones.
Rolando Beltrán Hurtado, héroe del Trabajo de la República de Cuba, más de 30 años como vanguardia nacional en la provincia de Santiago de Cuba y director del internado Abel Santamaría, reflexionó sobre la importancia de explicar a los trabajadores el porqué del movimiento Mi aporte a la Patria.
Dijo que lo primero que hizo el consejo de dirección y los dirigentes sindicales del colectivo fue analizar el significado de la palabra Patria, buscar las raíces y exponer los ejemplos de todos aquellos que dieron su vida por la independencia de Cuba, muchos, incluso, sin ser cubanos. “La patria se lo merece todo”, afirmó él y es que, según apuntó, estamos aquí gracias a esta Revolución que nos ha hecho grandes a todos.
Carmen Rosa López, Segunda Secretaria de la CTC, reiteró la preponderancia de la asamblea como espacio para analizar los problemas; saber por dónde va el empleo del presupuesto y además discutir con los trabajadores qué hacer para ser más eficientes o ver qué más se puede hacer el mejoramiento de las condiciones laborales.
Sobre los cuadros se enfatizó en la necesidad de vincularse con la base como ejercicio primordial de retroalimentación a fin de conocer con exactitud cómo se materializan los objetivos de trabajo y los principios fundamentales de la organización y para saber de primera mano qué piensan los trabajadores, dónde radican los problemas y cuáles son las causas y posibles soluciones.
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