No vamos a referirnos al serial de ficción transmitido por la televisión cubana, sino a un caso real que ya quita el sueño a la tunera Yicel Romero Quevedo, vecina del Reparto Buena Vista. Ella espera ansiosa su nuevo carné de identidad, luego de que el anterior y otros documentos se los sustrajeran en un ómnibus, durante un fin de semana de septiembre pasado.
El primer trámite de solicitud quiso realizarlo el lunes bien temprano, en la oficina ubicada detrás de la terminal de ferrocarriles, y como había muchas personas decidió irse para el trabajo y regresar al día siguiente, cuando abrían hasta las 7:00 p.m.
La remitente llegó dos horas antes de lo consignado, pero las compañeras le informaron que solo atenderían a otros tres ciudadanos que quedaban y como para justificar su decisión puntualizaron “que de todas formas a esa hora generalmente no brindaban el servicio, porque la conexión del sistema estaba bloqueada”.
Entonces preguntó si en sus circunstancias daban algún papel o certifico que fuera válido hasta que pudiera obtener su tarjeta de identidad y le respondieron que no.
Contrariada por el trato, el 9 de octubre se dirigió a la oficina de la localidad de Los Pinos. Su esposo tuvo que marcar en la cola desde las cinco de la mañana. “Allí nos entregaron un recibo para recoger el carné un mes después, aunque nos dijeron que podía estar alrededor de los 20 días, y la fecha del comprobante era el tope”, explica.
Transcurrido casi ese tiempo volvió con la esperanza de recoger el documento y le informaron que la valija donde son trasladados estaba perdida. Yicel comenzó a llamar sin éxito cada martes y jueves, días en que está fijada la llegada de las identificaciones.
Esa misma orientación se la reiteraron el 17 de noviembre, fecha de su segundo y último mensaje a Buzón abierto, en el que también precisa que su esposo se personó en la oficina y la respuesta fue: debe seguir esperando.
Ante esta situación no son pocas las interrogantes que se hace la lectora, que no sabe de qué o quién depende acabar de recibir su cédula oficial, que la ha necesitado para realizar algunas gestiones. ¿Será que ha tenido mala suerte?