“Quien visite la India se enamora de ella o la odia para siempre”. Tan categórica frase sostienen no pocas personas que han desandado los vericuetos de la amplísima gama cultural ofrecida por ese país asiático. Como un misterio se nos levanta en la lejanía. Es, junto a China, una de las civilizaciones más antiguas y de las que sobreviven todavía para contarnos de qué está hecha.
El trinitario Lázaro Morgado Orellana, totalmente prendado de las esencias de esa nación y fiel seguidor de los preceptos del yoga escogió la sede provincial de la Unión de Artistas y Escritores de Cuba (Uneac) para regalarnos el ensayo fotográfico En lo que pensamos, nos convertimos.
La noche de este sábado quedará abierta al público la exhibición durante un mes. Tan grande su superficie geográfica como la inmensidad de sus tradiciones; India se nos presenta esta vez en pleno bulevar yayabero.
Degustación de arte culinario, música tradicional, un conversatorio, demostración de ejercicios de yoga y muestra de objetos ceremoniales ocuparán la noche inaugural. Se presume la participación de la señora Vijayalakshmy Sunderrajan, Encargada de Negocios en la embajada de la India en la isla.
La muestra es resultado del periplo de Lázaro Morgado por aquella geografía que es sinónimo de ritualidad y costumbres; de castas, filosofías e historias por doquier. De acuerdo con el crítico de arte, Luis Rey Yero:
“La muestra de cultura india que hoy se presenta al público espirituano a través de la exposición fotográfica, la música, la ejercitación yoga y el arte culinario constituye un acicate para dar a conocer otras esferas imaginarias, distintas a las occidentales, donde la sensualidad erótica, el respeto al ser viviente y la meditación definen su idiosincrasia dentro de una perfecta armonía cósmica”.
De una nación que ha legado a nuestra especie parte de sí misma disfrutaremos por estos días en el centro de Cuba. Creadores del álgebra, el ajedrez y la trigonometría. En ella tuvo su origen la forma de medicina más arcaica de las conocidas por la humanidad: la Ayurveda
Pero, sin duda, este país también se ha hecho corpóreo por la imagen, ya icónica, del Taj Mahal. Considerado una de las sietes maravillas del mundo, se edificó para salvar de las fauces del tiempo una historia de amor verdadero.
Cuentan que en 10 mil años de historia, la India jamás ha invadido a otro país y digo “cuentan” porque creo firmemente que a lo largo de este mes en que nos acercaremos a sus secretos y atributos, nos conquistará sin remedios.
