De gris podría clasificarse el partido amistoso de fútbol sostenido entre la escuadra olímpica de Cuba y la selección de mayores de Nicaragua, un duelo celebrado el estadio Pedro Marrero (La Habana) y que se inclinó por los centroamericanos a raíz de un penal marcado en el minuto 60.
El exiguo marcador de 1-0, que favoreció a los nicaragüenses en su visita a la capital cubana, se concretó cuando el jugador Carlos Chavarría cobró desde los 12 pasos la falta cometida sobre su compañero de equipo Bryan García y envió la esférica al ángulo derecho de la puerta, burlando al portero cubano Sandy Sánchez.
Durante buena parte del choque primó la falta de creatividad en el centro del campo y el juego físico se encargó de tronchar intentos, ideas y piernas. Cuba —amplio dominador en el aspecto físico— jamás aprovechó su estatura para bombardear con centros el área defendida por Justo Carlos Lorente.
Valdría la pena destacar la labor defensiva de los nicaragüenses, quienes cerraron de manera certera las escasas llegadas de Cuba, en especial las que se produjeron en los últimos 10 minutos de juego cuando los anfitriones parecieron pisar el acelerador, pero sin conseguir inquietar el arco rival.
Tras finalizar el duelo Raúl González Triana, entrenador de los cubanos, aseguró que esa había sido la idea desde el principio: aprovechar el duelo amistoso para probar estrategias de juego raso, intentar potenciar el control del balón y la creatividad en el medio del terreno. En realidad, poco se vio en concreto.
Por su parte, el DT nicaragüense Henry Duarte se mostró muy complacido por el resultado de este miércoles ante Cuba, pues para los pinoleros esta victoria representó una excelente respuesta luego de haber sido eliminados de la carrera por la clasificación al Mundial Sub. 23.
Triana también aseguró que este partido, y el que será celebrado este jueves a puertas cerradas, sirven como preparación —no toda la necesaria, pero preparación al fin y al cabo— para encarar la final de Concacaf con vistas al torneo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
En tal sentido, el DT cubano reconoció que el primer duelo contra Canadá será clave en las aspiraciones de los nuestros, aunque patentizó su fé en la plantilla que dirige al asegurar: “Confío mucho en mis jugadores, ellos son la clave del éxito”.