Astaná.— Por tercera fecha consecutiva, los judocas cubanos no pudieron hilvanar avances en las eliminatorias del XXXI campeonato mundial que se celebra en esta ciudad, al caer Aliuska Ojeda (57 kg) y Magdiel Estrada (73 kg) en sus primeras presentaciones en el Palacio de Hielo Alau, que este viernes pareció más frío dada la lluvia de toda la noche y las primeras horas del día.
Aunque el escollo de Aliuska era durísimo, la holandesa Sanne Verhagen (bronce en el mundial pasado), el combate comenzó parejo hasta que la bronce panamericana tomó la ventaja por shido, gracias a demasiada pasividad de la europea. Segundos más tarde se igualaron las acciones por una amonestación a la nuestra, quien perdió en el minuto final por técnica de inmovilización, tras haber recibido wazari.
“Sabía que era difícil y cumplí toda la táctica, pero no pude contrarrestar su ataque en un momento que estaba yo más activa. No hablo de medallas, pero me había propuesto avanzar más que en mi primer mundial, en Chelyabinsk, donde quedé entre las 16 primeras”, comentó con humildad Ojeda, al tiempo que adelantaba mejores resultados de sus compañeras en los días siguientes.
Las mayores esperanzas de Cuba la jornada estaban centradas en el campeón de los Juegos Panamericanos de Toronto, Magdiel Estrada, rápido, motivado y preparado para enfrentar a Nikola Gusic, de Montenegro, un judoca ubicado en el puesto 124 del ranking universal, a pesar de ser medallista en varias Copas celebradas en Belgrado y Sarajevo.
“Me sorprendió con esa técnica cuando el ritmo lo había puesto yo. Es algo que lamento mucho porque pensaba hacerlo mejor que en el 2014, a partir de la preparación hecha y la motivación que siempre deja un oro como el de los Juegos Panamericanos”, señaló el joven judoca en la sala de calentamiento del torneo, donde permaneció para disfrutar del resto de las peleas.
De cualquier manera, el certamen transcurre para Cuba con balance de seis derrotas y apenas dos combates ganados, uno de Dayaris Mestre (48 kg) y otro de Yandri Torres (60 kg). Las mejores opciones, a partir de su calidad y premios a este nivel, aún no han salido al tatami y se espera, de un momento a otro, que comience el despegue, con atletas que conocen lo que es ganar preseas del orbe como Idalis Ortiz, Asley González, José Armenteros y Onix Cortés.
El turno de este jueves será para Maricet Espinosa (63 kg) e Iván Silva (81), quienes abrirán frente a la argelina Imene Agouar y el gabonés Paul Kibikai. La exigencia llegará en los siguientes enfrentamientos, pero ambos adelantaron que pueden cumplir el objetivo de acumular puntos para la clasificación olímpica.
Del resto de la jornada de este miércoles solo destacar el dominio de Japón en la división de73 kilogramos, en la cual hizo el uno-dos con Shohei Ono – Riki Nakaya; en tanto en 63, la campeona olímpica Kaori Matsumoto sumó su segunda dorada al derrotar en la final a la rumana Corina Caprioriu.
De esta manera, Japón marcha al frente del certamen con tres oros, dos platas y par de bronces, escoltada por Kazajistán (1-1-0) y Sudcorea (1-0-3).