Desde el año 1350 a. C., en el antiguo Egipto buscaban maneras rápidas de saber si una mujer estaba o no embarazada. Cuentan que las hacían orinar sobre semillas de trigo y cebada durante algunos días…, si una u otra germinaba era señal de que la familia iba en aumento.
Muchos otros ritos se popularizaron en el mundo con el mismo fin: contabilizar los vómitos de las féminas tras ingerir una mezcla de cerveza y dátiles, inyectarle orina a una rana para comprobar si desovaba, y no faltó quien, como el médico Jacques Guillemeau, dijera allá por el siglo XVI: “Una mujer embarazada tiene pupilas más chicas, párpados caídos y venas pequeñas en la esquina del ojo”.
La necesidad de cerciorarse de estos casos ha ocupado a los científicos desde tiempos inmemoriales y Cuba no ha estado exenta de ello.
Por estos días la noticia de una “nueva” forma para detectar la gestación corrió como pólvora en los medios digitales. En Cuba comenzaron a producirse tirillas de embarazo para uso profesional en el año 1996. Ahora, noveles formatos llegan no solo a las consultas de los especialistas, sino a las farmacias de todo el país.
A tu alcance
“El HeberFast Line Maternitest II es un autoensayo para embarazo diseñado y fabricado en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de Sancti Spíritus. Es una versión del primero que crearon los especialistas espirituanos en 1996, pero en ese entonces se producía en el CIGB de La Habana.
“En el 2003 asumimos la fabricación en la provincia, y seis años después, el MINSAP nos la solicitó para proveer a las consultas médicas de ese diagnosticador para uso profesional. Antes casi no se empleaban porque las producciones eran mínimas y pretendíamos insertarnos en el mercado internacional”, explicó Vladimir Leal Gómez, licenciado en Biología y responsable de Aseguramiento de la Calidad y Comercial en el CIGB de Sancti Spíritus.
La fuente confirmó que desde hace tres años elaboran más de un millón de pruebas para utilizarlas en policlínicos y en las áreas de urgencias ginecológicas. Para el 2015 prevén la entrega de un millón 200 mil, mientras en el próximo año superarán la cifra anterior en 300 mil unidades; todas destinadas al uso médico.
“Nunca antes se había comercializado este diagnosticador en farmacias. La tira es la misma, solo que está dirigida a personas sin conocimientos sobre medicina y por eso la presentación es diferente. Las instrucciones van al detalle, porque quienes las adquieran buscan rapidez, pero también un resultado certero; para ello no pueden equivocarse en el manejo del MaterniTest II.
“Los niveles de producción destinados a las farmacias dependerán de la demanda. Enviamos unas 250 mil pruebas a la Empresa Comercializadora de Medicamentos (Emcomed), encargada de distribuirlas por todo el país. Hasta ahora contamos con las materias primas para cubrir las necesidades del llamado test casero”, apuntó.
Sin complicaciones añadidas
El principio de este autoensayo es revelar la presencia de la hormona Gonadotropina Coriónica humana (hCG, por sus siglas en inglés) en la orina; esta se produce normalmente por las células del embrión y las que forman la placenta de las mujeres gestantes y sus cantidades aumentan desde la semana inicial del implante del óvulo fecundado. La tirilla puede detectarla desde el primer día en que se les ausenta la menstruación, con el 99 % de confiabilidad.
Para resultados más fidedignos se recomienda practicar el examen 72 horas después de la ausencia del período, pues el organismo habrá liberado suficiente hCG para frenar el sistema inmunológico materno y la menstruación. Aunque no existe un horario rígido para realizar el procedimiento, los especialistas señalan la primera orina de la mañana como la muestra ideal, porque contiene la más alta concentración de la hormona.
“Esta es una prueba cualitativa. En menos de un minuto puedes apreciar el resultado positivo, en la mayoría de los casos. El diagnóstico de embarazo por la detección de hCG es uno de los más certeros en el mundo. Es un test sencillo que por primera vez se comercializa en la red de farmacias por el precio, no tan módico, de 60 pesos en moneda nacional; el kit contiene una bolsa de aluminio con la tira reactiva dentro, una bolsita desecante para su conservación que no interviene en el proceso y un prospecto”, puntualizó el entrevistado.
La HeberFast Line MaterniTest II deviene herramienta que le confiere mayor privacidad a la mujer a la hora de comprobar una posible gestación. La exactitud, la posibilidad de repetirla las veces que sean necesarias, la rapidez del procedimiento y, ahora mejores niveles de acceso, son beneficios añadidos de este tipo de diagnóstico.
“Las tirillas tienen también un fin preventivo, pues con ellas nuestros profesionales pueden certificar tempranamente un embarazo y así darle el poder de decisión a la mujer de si desea o no llevarlo a término. Incluso, cuando las pacientes llegan a las consultas con cólicos leves a un lado de la pelvis, sangrado vaginal raro, ausencia de la menstruación u otro síntoma de embarazo ectópico, el test determina si ciertamente están en presencia de una gestación y el médico tiene más tiempo para definir qué hacer si el óvulo se desarrolló fuera de lugar.
“Las personas no tienen todo el conocimiento sobre el autoensayo, pero cuando constaten las ventajas, fomentarán su uso. Las tirillas además, ahorran presupuesto al país por ser menos costosas que un ultrasonido, cuyo precio (más de 100 pesos) corre a cuenta de los servicios de salud pública”, subrayó el especialista.
Este tipo de diagnosticador entró al mercado mundial en el año 1988 y desde entonces facilita la detección temprana del embarazo. A partir de ahora, Sancti Spíritus dará esa posibilidad a las mujeres cubanas, quienes tendrán a su disposición la cantidad de pruebas que cada provincia solicite. De acuerdo con el entrevistado, el CIGB puede sobrepasar el millón de tiras elaboradas para uso casero, si así lo demanda la población.
Basta con un minuto
Al entrar en contacto con la orina durante 15 segundos, la tira se coloca en una superficie horizontal, seca y no absorbente. Luego de esto, la zona del resultado mostrará un color rojo pálido hasta que aparezcan dos líneas si el resultado es positivo y una si fuera negativo.
De acuerdo con la explicación de Vladimir Leal Gómez: “Existen condicionantes que pueden complicar la interpretación de los resultados en este tipo de examen: una muestra de orina demasiado diluida, un embarazo de poco tiempo, los abortos espontáneos tan comunes en las primeras semanas, los tratamientos de infertilidad que usan hCG… Por estas y otras razones, la confirmación oficial del embarazo la debe dar un especialista, incluso con la efectividad de estos test”.
Con un tiempo de vida útil de dos años desde el momento en que se producen, estas pruebas “avisan” en tiempo récord la presencia de un embrión. En el prospecto aclaran que, tras haber sumergido la tira en la muestra por 15 segundos, deben esperar 10 minutos para obtener una respuesta; pero los especialistas aseguran que la reacción en los casos positivos es inmediata.
Sin efectos secundarios, dolor, ni la inserción de cuerpos extraños en el organismo, el kit nos dará certezas y tiempo para actuar desde la comodidad hogareña en tan solo un minuto.