La primera ronda de florete entre las mujeres reservó el duelo entre las dos cubanas que incursionaron en esta arma: Elizabeth Hidalgo y Daylen Moreno. De ese choque salió airosa Hidalgo, quien avanzó a la siguiente ronda tras vencer a su compatriota por la mínima 15-14.
Sin embargo, en la fase de cuartos de final, la cubana Hidalgo sucumbió ante el acero de la canadiense Alanna Goldie con marcador de 12-15. La norteamericana precisó únicamente dos asaltos para completar la faena que le aseguró la medalla de bronce y un puesto en las semifinales.
El último esgrimista cubano que verá acción en las pruebas individuales será el floretista Jesús Riaño, pero lo cierto es que tampoco él está dentro de las expectativas de medallas. Por esa razón, no sería gran noticia que Cuba se fuera sin medallas, luego de acumular tres bronces en los pasados panamericanos de 2011.