La calidad en los servicios está determinada en buena medida por la atención y otros factores subjetivos, que dependen de la voluntad del hombre y en los cuales el sindicato puede influir con su labor movilizativa y de organización.
Ni siquiera municipios como el de Calixto García, en la provincia de Holguín, con un buen desempeño en el comercio, la gastronomía y los servicios, escapa a esta realidad, pues todavía el trabajo no es parejo y subsisten deficiencias.
Los delegados a la conferencia municipal de este ramo coincidieron en que es necesario lograr un mejor funcionamiento de las organizaciones de base, de modo que sean capaces de aglutinar y conducir a los colectivos obreros hacia los objetivos propuestos.
“Estamos bien entre comillas, sentenció con claridad Ernesto Velázquez, pues atendemos bien a Buenaventura, la cabecera municipal; pero no somos capaces de llegar a Monte Alto, Sabanazo, San Agustín de Aguarás, u otros apartados asentamientos”.
Al sindicato le corresponde también contribuir a elevar la exigencia y control en cada centro, de modo que no ocurran casos como el del centro nocturno de Buenaventura, donde recientemente se invirtieron más de 700 mil pesos en su remozamiento y ya se perdieron llavines y otros accesorios.
Elba Esther Pérez Castro, del Secretariado Nacional del Sindicato Nacional de trabajadores del Comercio. La Gastronomía y los Servicios (SNTCGS), dijo que con el objetivo de seguir mejorando los servicios y responder al reto que representa la competitividad de los no estatales, es necesario rescatar la emulación, el movimiento de unidades modelos, bodegas de barrio y cuanto iniciativa sea posible