La articulación del trabajo preventivo y social en la comunidad en las condiciones actuales constituyó el tema debatido durante la jornada matutina de hoy por los integrantes de la Comisión de Atención a la Niñez, la Juventud y la Igualdad de Derechos de la Mujer del Parlamento cubano.
Al intervenir, Teresa Amarelle Boué, secretaria general de la Federación de Mujeres Cubanas, dijo que uno de los objetivos principales es enfocar la labor más hacia lo preventivo. Dijo que se ha apreciado desconocimiento no solo por parte de la población, si no de los organismos que tienen misiones y funciones sobre la integralidad del Decreto Ley 286, y dijo que existen debilidades en los grupos de coordinación del trabajo de prevención y asistencia social.
Afirmó que esta tarea, dirigida a nivel de país, por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, tiene la mayor dificultad a nivel de la comunidad. Valoró muy importante el papel coordinado de todos los organismos en esta labor, y en relación con la FMC, planteó que existen más de 76 mil trabajadoras sociales en el país, y la organización cuenta con las Casas de Orientación a la Mujer y a la Familia, que pueden apoyar esta actividad.
El trabajo preventivo no puede verse como algo añadido, es consustancial a la labor del maestro, expresó Ena Elsa Velázquez, ministra de Educación, al intervenir ante los diputados.
Hay que hacerlo todos los días y por todos, precisó. “Para nosotros el trabajo preventivo es sinónimo de que la escuela funciona, de que está organizada, existe disciplina, los maestros están preparados, existe un trabajo con la comunidad, la familia; funciona el consejo de escuela y se desarrollan las escuelas de educación familiar”.
Cuando eso ocurre, dijo, no hay fisura para que los estudiantes hagan algo negativo; es sinónimo de que la escuela marcha bien; hablamos de trabajo preventivo, de formación de valores; hablamos de la escuela como centro cultural más importante, y todo eso está relacionado, subrayó..
Agregó que el mayor reconocimiento que puede recibir la escuela, es que la familia la reconozca como el centro cultural.
Por su parte, Margarita González, ministra del Trabajo y Seguridad Social, expresó que durante los dos años en que este ministerio ha coordinado el trabajo de los diferentes organismos en relación con el tema, se ha podido constatar que están creados todos los sistemas y falla cuando alguien deja de hacer lo que le corresponde.
Acotó que los principios de funcionamiento están vigentes: constitucionalidad, integración, sistematicidad y control y evaluación.
Varios diputados expusieron experiencias acerca de la importancia del trabajo en la comunidad y del vínculo de la familia y la escuela. En ese sentido estuvo la intervención de Anais Abreu, de la provincia de Villa Clara, quien se refirió a los diversos proyectos comunitarios que existen en el territorio y que agrupan a niñas y niños, jóvenes, mujeres y personas de la tercera edad. Yosvany Reyes, de la provincia de Granma, se refirió a la importancia de realizar diagnósticos correctos en los diferentes territorios, y dar prioridad a las problemáticas detectadas.