Este viernes, en la sala Avellaneda, del Teatro Nacional de Cuba, Alexander Abreu y su talentosa banda Habana De Primera (HDP), someterán al público su más reciente fonograma, el CD La vuelta al mundo. El concierto tendrá además el aderezo de tener invitados especiales, entre ellos el salsero nicaragüense Luis Enrique.
Hemos creado un espacio en nuestro concierto —dijo Abreu— para que Luis Enrique cante para los cubanos. Sabemos que el Príncipe de la Salsa gusta mucho aquí y que tiene seguidores desde hace años cuando se hicieron famosos temas como Yo no sé mañana, Cambia y Cómo volver a ser feliz.
Con Luis Enrique, cantante, guitarrista y percusionista nica, Alexander grabó el número que da título al disco y este sábado harán juntos el video clip promocional.
Alexander, trompetista y director fundador de HDP, declaró que el propósito de La vuelta al mundo, disco con el que este año ganó el Gran Premio Cubadisco y el de Música Popular Bailable, fue llegar a los bailadores del mundo de una manera más directa desde el punto de vista musical y también en los textos:
“Aguantamos un poco el nivel buscando la mejor manera de atravesar el mundo con nuestra música, haciéndolo de una manera más nítida. Por eso en los 12 temas, todos compuestos por mí, me detuve en cada uno de los textos para decir las cosas lindas y especiales de manera que nos puedan entender en cualquier lugar, sin exceso de cubanismos ni de violencia”.
Hay demasiada violencia en la música, —reflexionó Abreu— mucho de lo que escucho son cosas negativas cuando en realidad los artistas deberíamos cantarles a la belleza de la mujer, al amor, a la amistad, a Cuba… Una de las consecuencias de esto es el exceso de frases locales en los textos, eso obstaculiza la comprensión de lo que se quiere decir y, por tanto, la expansión de esa música por el mundo.
Yo no me considero un buen compositor —reconoce el virtuoso trompetista— porque todo lo que escribo tiene que ver con mi propia experiencia, pero esa autenticidad también ha servido para que la gente se identifique con mi trabajo. Recuerdo que en una ocasión, en el Salón Rosado de La Tropical, un hombre me esperó al final del concierto y me confesó que gracias a mis canciones había salido del mal camino. Esa es una de las razones por las que sigo haciendo este tipo de canciones, contó.
En los temas de La vuelta al mundo, se aprecia un homenaje al virtuosismo de los músicos que han hecho su vida en agrupaciones de música popular como Irakere, “también a Chapotín en la trompeta del tema La venenosa”, recordó Abreu.
Esto es posible por el quehacer creativo de la agrupación, en la que todos los músicos enriquecen cada número con sus ideas. Jorge Benítez, quien ha llevado el sonido de las tres últimas obras fonográficas de HDP, dio fe de este proceder.
Todos los discos de HDP han sido grabados en los Estudios Abdala, “mi Palacio de la música”, le llama Abreu.
La vuelta al mundo fue producido por Pafata Productions, licenciado en Cuba por el sello Unicornio, y también tiene como invitados a Mario Rivera (Mayito) y el grupo Osaín del Monte.
