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Instrumento para la toma de decisiones

Meisi Bolaños en Asamblea Nacional

Foto: Ariel Ley Royero

Por Hugo Pons*

El presupuesto ha estado vinculado con el surgimiento y desarrollo del Estado. Por ello, además de constituirse como uno de los instrumentos financieros principales, refleja los intereses y el grado de compromiso de esa institución para con sus ciudadanos, así como el grado de intervención de este en la vida económica del país.

En Cuba, el presupuesto(1) se concibe como el documento e instrumento jurídico político, elaborado periódicamente en el que, en forma de balance, se plasma el nivel máximo de gastos y las provisiones de recursos financieros que realizará el Estado durante el ejercicio económico, en correspondencia con el plan de la economía.

En ese instrumento se expresan las siguientes características:

Carácter jurídico: El presupuesto es una institución jurídica fundamental de derecho público, que sanciona la competencia del poder legislativo para controlar la actividad financiera del ejecutivo, al aprobarse generalmente con carácter de ley anual por los parlamentos, en los diferentes países.

Carácter político: Refleja cuantitativamente las líneas de política económica y, en particular, la fiscal, del Estado.

Carácter planificado: Es un plan económico que constituye la articulación entre recursos y objetivos.

Como balance, a fin de cuentas, el presupuesto muestra la relación entre los ingresos y los gastos, expresada en términos monetarios. Dicha relación indica, como resultado de la sustracción entre ambos, si su ejecución ha sido equilibrada, superavitaria o deficitaria, lo que condiciona las acciones y decisiones, por parte de los decisores de la política pública, a través de las estructuras en que se proyecta futuro. Es así que se identifica como un proceso que constituye la forma en que se prevé, ejecuta y controla la actividad económica financiera del sector público, lo que le otorga su carácter sistémico, al involucrar los procesos para la elaboración, ejecución y control del presupuesto del Estado a todos los niveles presupuestarios, es decir, a todas las instancias de gobierno.

Como parte de ese proceso, se relacionan el esquema de planificación y programación con el presupuesto del sector público. Es por eso que prevé la capacidad de compras y pagos del Estado, materializando las orientaciones y objetivos incluidos en los restantes instrumentos de planificación y programación.

Los planes de largo y mediano plazos se elaboran para el conjunto de la realidad nacional, regional, provincial o municipal, cuya concreción en el corto plazo se expresa a través de la programación operativa anual.

*Doctor en Ciencias Económicas

1 Administración Financiera del Estado Cubano. Capítulo 3, Sistema Presupuestario, págs. 78 y 79. CECOFIS. MFP. La Habana. Cuba

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