Las selecciones de Cuba y Argentina se medirán las noches de viernes y sábado en el coliseo de la Ciudad Deportiva de La Habana, en la continuación de las acciones del grupo C correspondiente a la XXVI Liga Mundial de Voleibol.
Luego de la división de honores acaecida en la urbe gaucha de Mendoza, hace dos semanas, los nuevos partidos definirán cual elenco sacará mayor provecho de la confrontación bilateral liguera.
Los sudamericanos, sin Julio Velasco al frente por una decisión estratégica, desembarcaron con el mismo grupo que presentaron en sus series anteriores frente a cubanos y canadienses.
La nómina incluye a Nicolás Bruno, Maximiliano Chivirino, Cristian Poglajen, Demián González, José Luis González, Federico Martina, Federico Franetovich, Pablo Crer, Martín Ramos, Luciano Zornetta, Facundo Santucci y Rodrigo Villalba.
El DT de turno, Julián Álvarez, aseguró que “actuar en Cuba siempre es interesante. Serán partidos difíciles que dejarán gran experiencia a este grupo de jóvenes jugadores. Esperamos competir con el mismo nivel que exhibimos ante Canadá el sábado pasado, cuando salimos airosos en cinco parciales. Ese día mostramos calidad en el servicio y el ataque, elementos que pensamos volver a repetir acá”.
La formación cubana también dependerá de los mismos hombres inscritos la semana anterior, aunque se añade como novedad la disponibilidad de un segundo líbero, el juvenil Lionnis Salazar.
Los restantes convocados son Yosvani González, Ricardo Calvo, Javier Jiménez, Yonder García, Rolando Cepeda, Liván Osoria, Miguel David Gutiérrez, Mario Rivera, Osmany Uriarte, Dariel Albo, Adrián Goide y Luis Estrada.
El timonel Rodolfo Sánchez consideró que “este será el segundo fin de semana jugando en casa. El equipo está entrenando más suelto y pensamos resolver mejor los finales de sets, algo que estuvo muy mal en la serie frente a Bulgaria. Enfrentar a Argentina es una gran oportunidad, pues se trata de un equipo de oficio, técnica y calidad. Esperamos que la afición salga complacida del coliseo”.
Sobre las razones de tan malos cierres en parciales posibles de ganar, Sánchez se refirió al aspecto emocional y a la presión sufrida por varios jugadores que jamás habían actuado ante su público en una lid tan importante. Lamentó, en particular, el bajo rendimiento de Jiménez, quien quiso demostrar un gran rendimiento y acabó vencido por la ansiedad.
El profesor aseguró que para obtener triunfos urge que Cepeda, Uriarte y Jiménez tiren parejo del plantel, con aportes sobre los 15 tantos cada uno.