En marzo publicamos una carta remitida al periódico por Benito Bejarano Padrón, delegado de la circunscripción No. 48 del Consejo Popular La Coloma, en Pinar del Río.
Los problemas con las condiciones higiénico-epidemiológicas de su comunidad y las respuestas evasivas motivaron a este representante de pueblo a pedir ayuda para resolver la alarmante situación que él resumía en vertimiento de aguas albañales, contaminación del agua potable, así como la presencia de roedores y otros vectores.
Al respecto nos respondió el ingeniero Gustavo González Naranjo, director general de la empresa de Acueducto y Alcantarillado de ese territorio occidental, quien asegura que evaluaron y adoptaron las decisiones pertinentes en aras de solucionar tanta molestia y peligro.
Rápido efecto surtió la publicación del artículo, pues ese mismo día una comisión integrada por directivos y especialistas provinciales y municipales visitó la comunidad, plantea.
En beneficio de La Coloma se ejecutó recientemente un mantenimiento al sistema de alcantarillado. Fueron desobstruidos todos los registros y tramos del emisario final hasta la laguna de tratamiento, y sustituidos seis segmentos del conducto, lo cual permitió reconectar la tubería afectada, explica.
Además, se trabaja por completar los recursos necesarios para fabricar las tapas de los registros.
Por todo lo manifestado, a juicio del titular de la entidad, ya no existe riesgo de contaminación del agua.
En su misiva señala que el sistema de alcantarillado de la zona no funcionaba adecuadamente desde hacía unos años, aun cuando habían realizado acciones con vistas a limpiar el emisario final.
Esa situación se agravó porque algunas personas dañaron varios tramos por las conexiones ilegales para utilizar el agua en regadíos. Así provocaron sedimentación en las tuberías, lo que derivó en tupiciones frecuentes, agrega.
Los citados motivos llevaron a la empresa a coordinar con las direcciones de Higiene y Epidemiología y la Integral de Supervisión, para junto con los directivos de Acueducto y las organizaciones de la comunidad enfrentar dichas violaciones.
González Naranjo significó que el tema requiere el seguimiento de sus homólogos en el municipio, pues sucesos similares han ocurrido en La Coloma con anterioridad. Asimismo, destacó la colaboración de los vecinos en las acciones realizadas por los trabajadores de la entidad.