La afirmación de que la cadena hotelera Meliá seguirá apostando por su presencia en Cuba trascendió durante la jornada de homenaje a los fundadores del Sol Palmeras, instalación fruto de la primera empresa mixta creada en Cuba, y cuya apertura tuvo lugar el 10 de mayo de 1990.
“Seguiremos apostando por Cuba y por el esplendoroso desarrollo turístico de esta querida tierra”, señaló uno de sus más importantes gerentes, en un audiovisual difundido a propósito de los 25 años del establecimiento de la firma extranjera, la primera que se vinculó al turismo en este caribeño país.
La decisión la asociaron con la confianza que ofrece un territorio como el cubano, donde el nivel cultural y capacidad innata de sus habitantes para ofrecer hospitalidad es considerada un incalculable recurso, “una riqueza que cualquiera envidiaría”.
Una historia de 25 años, como se nombra la propuesta comunicativa, ofrece evidencias de lo que significó que una entidad representativa de España decidiera invertir en la Mayor de las Antillas, en un momento particularmente difícil como en los inicios de los 90, justo cuando leyes extraterritoriales presionaron para que ninguna nación pusiera sus ojos en Cuba.
En aquel entonces, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz, expresó que los españoles demostraron que son valientes, desafiaron prohibiciones y se quedaron con Cuba, pese a presiones. “Estos españoles que cruzaron los mares, hablaron con nosotros, hicieron negocios con nosotros, fueron los primeros. Les corresponde por eso un lugar en nuestra historia”.
En el referido material, Fidel precisa que “nuestros socios no traen solo capital, traen otras cosas que tienen una importancia tan grande, traen algo que se llama experiencia en organización y explotación de de instalaciones turísticas, experiencia al más alto nivel mundial, que nosotros estamos muy lejos de tener”.
Tras concluir la presentación de Una historia de 25 años, Tomeu Alcina, director general del hotel Sol Palmeras, ubicado en el polo de ocio de Varadero, reconoció ser la Meliá una transnacional que ha elevado su lujo a un nivel altísimo; sin embargo, dijo orgulloso: “El mayor lujo de la instalación donde dirijo es la gente con la que trabajo. Ahí radica nuestro éxito”.
Para la Meliá, que gestiona aquí 27 hoteles y unas 13 mil habitaciones, el mercado cubano es el tercero con mayor capacidad de alojamiento, antecedido solo por Alemania (33 hoteles) y España (163 hoteles), según las últimas estadísticas.
