Una brigada médica cubana, integrada por 49 especialistas, viajó en la madrugada de este viernes a Nepal para asistir a los damnificados por el terremoto de 7,9 grados en la escala abierta de Richter, que el pasado 25 de abril devastó a gran parte del territorio de esa nación y ha cobrado la vida de cerca de ocho mil de sus habitantes.
La víspera, el doctor Roberto Morales Ojeda, ministro de Salud Pública, abanderó a esta brigada, que lleva un hospital de campaña con unidad quirúrgica y otra de cuidados intensivos, laboratorios, rayos X, ultrasonidos, esterilización, áreas de consulta y rehabilitación, además de medicamentos, agua, una planta para el tratamiento de la misma y la experiencia de misiones anteriores cumplidas por la mayoría de los incorporados a este equipo.
Fue conformada en 24 horas, y entre ellos hay 25 médicos, diez licenciados en enfermería, fisiatras, fisioterapeutas y hasta un cocinero, que representan a 12 de las provincias de Cuba.
Son miembros del Contingente Internacional de Enfrenamiento a desastres y grandes epidemias Henry Reeve, el cual ha laborado ya en 25 países, entre ellos Pakistán, Sri Lanka, Indonesia, Haití, México, Perú y Chile; en este último aún trabajan los médicos cubanos.
Es la brigada número 41 que se constituye desde que el 19 de septiembre del 2005, se creara el contingente tras el azote del huracán Katrina, en Nueva Orleáns, Estados Unidos, cuya ayuda fue rechazada por el gobierno norteamericano. En ese momento 10 mil galenos ofrecieron su disposición para partir hacia la zona del desastre.
Marcia Cobas, viceministra del Minsap, informó sobre las expectativas que tiene el pueblo de Nepal con la ayuda médica, trasmitidas a Cuba por los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores, que ya se encuentran en ese país, creando las condiciones y haciendo las coordinaciones pertinentes para el despliegue de las instalaciones médicas, las casas de campaña y la seguridad del personal de salud.
Precisó que el gobierno nepalí necesita a este personal médico, el cual se sumará al de otros países y a hospitales que funcionan allá. Se proponen adjuntar el cubano a la sede de la universidad, que tiene en una zona aledaña una instalación con 25 camas y un edificio antisísmico.
Las autoridades de ese país reclamaron la incorporación de especialistas en rehabilitación, dadas las secuelas que ya están saliendo por los tantos días de afectaciones; también se reportan brotes de epidemias.
Al hablar en nombre de sus colegas, el doctor Luis Orlando Oliveros Serrano, jefe de la brigada, enfatizó en el compromiso de librar un combate por la vida de los nepalíes, y llevar la ayuda, el aliento y la solidaridad como lo han hecho las similares que han salido anteriormente.
Fuentes de la Organización de las Naciones Unidas informaron que la mayoría de los hospitales de los 12 distritos más afectados por el terremoto siguen funcionando, pero algunas instalaciones están completamente destruidas o el daño que han sufrido no les permite continuar sus labores. Hay progresos en la entrega de ayuda a los damnificados y ahora las dos prioridades son la distribución de los suministros y lograr que la gente vea resultados, reportó EFE.
Dieron a conocer además, que la ayuda brindada en material de refugio, suministros de comida y de higiene, están llegando a las zonas más devastadas. También se trabaja en las medidas de prevención ante el monzón que llegará en cuatro semanas. Se trata de proporcionar todo el material necesario para que la gente sobreviva durante todo el invierno y la estación de lluvias.
El terremoto que azotó a Nepal dejó al menos 7 mil 557 muertos y alrededor de 14 mil 400 heridos, provocó 2 mil 800 millones de desplazados internos y destruyó unas 200 mil edificaciones, mientras otras 190 000 resultaron dañadas, según datos oficiales.