Amélie Schmitt, jefa de relaciones internacionales del Ministerio de Salud de Francia, destacó que están muy satisfechos por los aportes que desde el punto de vista científico les ha proporcionado el evento Cuba Salud 2015.
“Los temas que más nos interesa abordar, con relación a la cooperación médica, son envejecimiento poblacional, seguridad sanitaria y el tratamiento de las enfermedades crónicas”.
La representante de la delegación francesa, precisó que desea aprender sobre el funcionamiento de la atención primaria de salud, debido al vínculo que existe entre esto y los hospitales, algo que muchos países desarrollados deben fortalecer.
Por su parte, la ministra de Salud de Haití, la doctora Florence Duperval, expresó que los indicadores de este sector en su país han ido en total crecimiento desde que el gobierno cubano formó a médicos haitianos; más de 800 galenos se han graduado como parte del programa de cooperación con la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM).
“En estos momentos estamos fortaleciendo las especialidades médicas y la formación de personal especializado en la vigilancia epidemiológica, en el cual necesitamos mucha ayuda cubana para erradicar el virus del cólera”.
“Además seguimos transformando las estructuras de nuestro sistema de salud desde el propio nivel primario con el objetivo de ser capaz de trabajar con eficacia desde la base, al igual que lo hace Cuba”, concluyó.
En la isla antillana se han reducido a la mitad las cifras de la mortalidad infantil y materna, además de haberse institucionalizado en las zonas rurales el proceso del parto todo gracias a la cooperación Cuba-Haití.
Tanto Francia como Haití elogiaron, durante la tercera jornada de la Convención Cuba Salud 2015, las vivencias de solidaridad cubana y el empeño del país por seguir aumentando la calidad médica mundial.
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