Apegada a las leyes, a la historia de los procesos electorales en Cuba luego del triunfo de la Revolución, Minerva Valdés Temprana integra como vocal la Comisión Electoral Nacional (CEN) para los sufragios parciales del próximo 19 de abril.
La jurista consideró oportuno rememorar la experiencia puesta en práctica en Matanzas en 1974 cuando —por primera vez— quedaron constituidos los órganos del Poder Popular, elegidos los candidatos que integrarían las asambleas municipales y creadas las circunscripciones. “Eso fue el preludio de los principios vigentes hoy”.
Precisó que luego del triunfo de la Revolución se han promulgado tres leyes relacionadas con el sistema electoral, la primera de ellas, la Fundamental de la República de 1959, que introdujo modificaciones a la Constitución del 40. Luego, en mayo de 1974, se introdujeron cambios, y se consideró el voto como un derecho, deber social y moral de los ciudadanos.
En julio de 1976 se promulgó la ley electoral 1305 —la primera de su tipo luego del triunfo— y en 1992, a partir de la modificación de la Constitución, se dictó la número 72, la cual dejó establecido, entre otros aspectos, que los diputados fueran elegidos por el voto de los electores a nivel de circunscripción, lo cual hasta ese momento recaía en las asambleas municipales.
Destacó el papel que han tenido las masas populares desde el surgimiento del sistema de los poderes populares, así los CDR, la FMC y la Asociación de Combatientes actúan como una polea movilizativa y de apoyo.
El proceso electoral cubano está regido desde el punto de vista legal, o sea ninguna persona o comisión de cualquier instancia puede trazar estrategias que no estén contempladas en la ley electoral.
Regresemos al presente, ¿ahora cuáles son sus funciones como vocal de la CEN?
Cuanta tarea indique la presidencia de la Comisión, además atendemos territorios y realizamos visitas. Recientemente estuvimos junto a otros compañeros en Mayabeque para comprobar cómo se están preparando con vistas al próximo día 19 y otros aspectos relacionados con el aseguramiento material. Son detalles que deben precisar las comisiones electorales de los municipios, conjuntamente con los cuadros administrativos.
De igual manera, vimos la capacitación de las mesas electorales, la exposición de las biografías de los candidatos, el estado de los colegios, y algo novedoso en este proceso parcial es que la cifra de electores puede llegar hasta 700 en cada uno de ellos, aunque en realidad ninguna provincia alcanza esta cifra.
En relación con la exposición de las biografías se logró dotar a todas las provincias de murales plásticos, que otorgan a tal acción de una dignidad extraordinaria, es un gesto de respeto a las personas, cuya imagen y biografía aparecen ahí; ellos son de los mejores ciudadanos que tenemos en los barrios.
El propio 19, junto con otros miembros de la Comisión, estaremos visitando algunos colegios. Nuestra labor es eminentemente técnica, legal, y debemos estar al tanto de cualquier detalle como, por ejemplo, que fluyan en tiempo los partes, lo cual está establecido en la ley 72, en la cartilla electoral y en las reglas complementarias. Cada quien sabe su misión, pero la de todos es garantizar el éxito del proceso con la debida transparencia.
A propósito de la nueva figura del observador, ¿pudiera precisar algunos detalles?
El principal observador del proceso electoral es el pueblo, que asiste a las reuniones, propone candidatos y luego tiene la posibilidad de ejercer el voto. No obstante, se han preparado a muchos jóvenes, estudiantes universitarios, con el concurso de las universidades, la FEU y la UJC —tres por circunscripciones y con preferencia de que allí residan— que son colaboradores del proceso y trabajan con una guía de observación muy sencilla.
Ya participaron en las asambleas de nominación con una actuación valiosa y estarán presentes el día de las elecciones. Ellos pudieran en un futuro ser autoridades electorales en los distintos niveles.
