La Cumbre de los Pueblos criticó en su declaración final el militarismo intervencionista de EE.UU., rechazó que se considere a Venezuela como una “amenaza”, respaldó la reivindicación de Argentina sobre las Malvinas y reclamó la independencia de Puerto Rico. “Nosotros, los pueblos de nuestra América, expresamos nuestro firme respaldo a la proclamación de América Latina y el Caribe como zona de paz y libre de colonialismo”, comienza la declaración final emitida hoy y en la que rechazan “el acoso militar, agresiones y amenazas de toda índole que despliega Estados Unidos y sus aliados estratégicos” contra la región. “Ningún país tiene derecho a juzgar la conducta de otro ni muchísimo menos a imponerle sanciones o castigos por cuenta propia”, sostiene la declaración.