La presencia de Cuba por primera vez en la reunión hemisférica fue destacada casi de forma unánime por los oradores en la inauguración este viernes del segmento de alto nivel de la VII Cumbre de las Américas en Panamá, con la presencia de mandatarios y altos representantes de los 35 Estados del continente.
El Presidente de la República de Panamá, Juan Carlos Varela, pronunció el discurso que cerró la jornada, en el cual dio la bienvenida oficial a los participantes e hizo votos por una reunión que permita avanzar en los propósitos de integración y cooperación, con mención particular a la participación de Cuba en la cita.
Anteriormente, Ban Ki-moon, secretario general de la Onu, también destacó la presencia del presidente Raúl Castro Ruz, como algo que hacía mucho tiempo deseaban los presidentes de la región, y se refirió al proceso hacia el restablecimiento de las relaciones con Estados Unidos. También saludó el proceso de paz de Colombia que se desarrolla en La Habana y se refirió a la paz al decir que la región está comprometida con ella.
El cardenal Petro Parolin, en nombre del Papa Francisco, leyó un mensaje, dirigido al Presidente panameño, así como a todos los participantes en la Cumbre, en el que hizo un llamado a la paz.
Expresaba el sumo pontífice en el texto estar convencido de que la inequidad es fuente de violencia y atenta contra la dignidad de las personas. Refirió que el reto es la globalización de la solidaridad. También recordó la brecha que existe entre ricos y pobres, así como las necesarias acciones en favor de los más desfavorecidos.
José Miguel Insulza, secretario general de la OEA, también comenzó haciendo alusión a que es la primera vez que se reúnen los 35 jefes de Estados del Hemisferio en torno a la misma mesa.
En su discurso mencionó el proceso de negociación para la paz en Colombia, las conversaciones entre Cuba y Estados Unidos para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, al proceso electoral en Haití, entre otros aspectos, que muestran, dijo, la importancia del diálogo hacia la paz como único camino para avanzar.
También, especificó que América no es un continente pobre, pero, uno de cada cuatro de sus habitantes lo es. Más adelante, deseó éxito en la futura gestión de Luis Almagro al frente de la OEA.