Nueva Gerona.— Una jugada muy controvertida, que exigió acudir al video y finalmente se decidió quieto —aunque algunas fotos daban out— le dio la victoria a los Piratas de Isla de la Juventud 7-6 sobre los Tigres de Ciego de Ávila en once entradas, lo cual igualó a dos triunfos el play off por el título de la 54 Serie Nacional de Béisbol.
Tras el hit de oro del inicialista Luis Felipe Rivera, el corredor Julio Pablo Martínez – en segunda base por hit y sacrificio de Dainier Gálvez— dobló todo el tiempo y se deslizó por fuera del home, aunque el esfuerzo del receptor avileño Osvaldo Vázquez fue efectivo tras un perfecto tiro del jardinero José Adolis García. El árbitro levantó las manos en señal de QUIETO y la locura se apoderó del estadio Cristóbal Labra.
Minutos después, la reclamación del mentor Roger Machado ratificó la decisión del hombre de negro, sobre todo porque no se apreciaba con claridad en el video. Justo es decirlo, esto no empaña para nada la combatividad y el éxito de los pineros, que por cuarta ocasión en esta postemporada –semifinal y final- consiguen salir airosos sin la sombra de un revés en extrainning.
Otro momento dramático del encuentro había ocurrido en el séptimo episodio, cuando los Piratas aprovecharon la salida del abridor Dachel Duquesne para empatar e irse arriba en el marcador, tras “entrarle por los ojos” al relevista Vladimir García, quien propinó un pelotazo a Alfredo Rodríguez que calentó los ánimos de los locales y provocó la expulsión del torpedero.
El racimo de seis carreras de los pìneros estuvo marcado por el descontrol de Vladimir – dos boletos- y par de sencillos de Michel Enríquez y Luis Felipe, así como doble de Jorge Tartabull, este último frente al zurdo Leorisbel Sánchez. Solo Osmar Carrero pudo contener el buen momento de los Piratas.
Sin embargo, como buenos tigres, salieron en el octavo dispuesto a morder a sus rivales y Yeniet Pérez le desapareció la esférica por el jardín izquierdo al cerrador Héctor Mendoza, que esta vez comenzó a lanzar en el octavo y fue bateado con mayor facilidad, pero a la postre marcó su calidad y se llevó la tercera victoria en esta postemporada.
Más allá de lo ocurrido, este cuarto pleito dejó claro que los Piratas marcan sus territorio sobre todo en el último tercio, cuando nadie puede festejar por adelantado la victoria —hasta el séptimo solo habían conectado dos imparables—, al tiempo que el despertar de hombres claves como Michel y Luis Felipe resultaron la mejor inspiración para el elenco.
El propio Michel había cometido un costoso error en el segundo inning que costó las tres primeras rayas de los tigres ante el abridor Ulfrido García, quien tuvo en Luis Manuel Suárez otro relevo de altura por cinco entradas con una sola anotación permitida en el quinto por hit de Humberto Morales con par de hombres en base por pasaporte gratis.
Esta sonrisa de Isla de la Juventud obliga ya a un sexto desafío en el estadio José Ramón Cepero el próximo viernes, pero antes, este miércoles, el caluroso e hirviente estadio de la capital pinera acogerá el duelo Ismel Jiménez versus Javier Vázquez en pos de una tercera victoria que lo acerca más al título.