Pavel Aguedo Marrero cumplió sus 37 años en medio del ajetreo de la Conferencia Nacional del sindicato de Energía y Minas. Este joven desde hace varios años es secretario del buró sindical de la Termoeléctrica Lido Ramón Pérez, en Mayarí, provincia de Holguín.
De sus treinta y siete años casi diez han estado dedicados a las labores del sindicato de su entidad y quienes lo conocen aseguran que es capaz de representar al colectivo en los más disímiles problemas, hablar claro y preciso y llamar los asuntos por su nombre. También su impulso es decisivo para fortalecer las labores productivas y exigir un extra a favor de la eficiencia, el ahorro y la disponibilidad técnica de las plantas.
Para sorpresa suya los delegados a la cita lo recibieron cantándole las felicidades en medio de aplausos deportivos, aunque Pavel asegura que la mayor felicidad de este día es haber adquirido herramientas para hacer mejor su labor en la organización de base y a partir de ello potenciar los procesos económicos en cada una de las áreas de la termoeléctrica.
“Estoy feliz, este es un cumpleaños inolvidable y con una familia especial, me he emocionado incluso con las muestras de afecto y con el cariño que me han brin dado mis compañeros de labor”, confesó visiblemente emocionado y con una sonrisa cómplice de felicidad.
Sus compañeros de delegación reconocen en él a una joven entregado a sus funciones, activo y entusiasta, también enérgico y profundo en sus argumentos, dinámico y alegre, alegría que desbordó junto a sus colegas en la celebración de su onomástico.